SEVILLA. Rubi, en una rueda de prensa tras el entrenamiento que dirigió en el propio estadio verdiblanco, dijo que "lo más bonito" en el fútbol es "acostumbrase a ganar sin bajar el nivel de compromiso", ya que cuando la racha es positiva, "algunos partidos los ganas por inercia o los pierdes si la dinámica es mala", como le pasó al Betis "en Granada, donde lo más justo hubiese sido un empate".

El técnico bético desea seguir la línea que lo ha llevado a sumar dos triunfos sumados de forma consecutiva, aunque incidió en el rendimiento con independencia del resultado, ya que "el gran partido ante el Valencia reafirmó que había cosas que no se estaban haciendo mal". "Si (Sergio) Canales no marca en el descuento, el resultado hubiese sido un empate y el trabajo fue el mismo", aseguró.

Las victorias ante el Valencia (2-1) y Mallorca (1-2), sin embargo, no llevan al técnico catalán a "pensar que está todo solucionado" porque ahora está "contento al ver al equipo mucho mejor" pero debe expresarse "con cautela, porque esto gira cada semana".

Rubi repasó el estado de los lesionados de larga duración, como el inédito Francis Guerrero, quien "tuvo una pretemporada complicada pero la mayoría de semanas ha estado disponible", si bien le está "costando mucho darle el premio" de jugar porque dispone de "tres laterales derechos".

El centrocampista portugués William Carvalho pasa "hoy una revisión" tras su operación de espalda "en Portugal" y espera "que pueda volver al equipo en enero", mientras que el delantero Juan Miguel Jiménez 'Juanmi' "lo está pasando fatal con su lesión" en un pie "y tiene muchas ganas de ayudar al equipo".

Rubi no descartó la posibilidad de "jugar con dos delanteros", ya que "Loren -Morón- y Borja -Iglesias- son jugadores excelentes y claro que se puede", si bien recordó que cuando los ha "utilizado juntos, es cierto que no se termina de arrancar" pero puntualizó que puede "volver a hacerlo".