bilbao - Iñigo Martínez se convirtió ayer en el fichaje más caro de la historia del Athletic. Jon Berasategi, director general del conjunto rojiblanco, se personó al mediodía en la sede de La Liga de Fútbol Profesional para abonar los 32 millones de euros que figuraban en la cláusula de rescisión que el central de Ondarroa había firmado con la Real Sociedad en 2016. La confirmación oficial llegó pasadas las 15.00 horas y en la misma información se comunicó que el defensa sería presentado por la tarde en San Mamés. Hasta allí se acercó Iñigo Martínez pasadas las cinco de la tarde, acompañado por su familia y varios amigos de su cuadrilla, alguno de ellos aficionado de la Real, como apuntaría en su comparecencia ante los numerosos medios de comunicación que siguieron el acto. Allí firmó el contrato que le unirá al Athletic hasta el 30 de junio de 2023 con una cláusula de rescisión de 80 millones y pisó de nuevo el césped de La Catedral, aunque por primera vez con la zamarra rojiblanca. Antes de saltar al campo lanzó un mensaje claro y contundente: “Vengo a un grande”.

El central arrancó la rueda de prensa agradeciendo la apuesta realizada por el equipo bilbaino para su contratación. “En primer lugar tengo que darle las gracias al Athletic por lo que me han transmitido estos días. Han apostado fuerte por mí y eso me ha hecho dar el paso”. No quiso olvidarse de su anterior equipo, al que le dio las “gracias” por todo lo que hicieron por él desde su llegada a Zubieta con trece años y les deseó “lo mejor”. “Espero que salgan cuanto antes de la situación en la que están. En parte, me siento responsable de cómo está. Sé que no ha sentado nada bien que haya salido, pero tenía que pensar en mi futuro”, añadió. Además, hizo público que se enteró del interés del Athletic “horas después” de jugar contra el Villarreal, un encuentro que los txuri-urdin perdieron por 4-2 el pasado sábado.

Iñigo no pudo ocultar que la decisión fue complicada. “Una de las que más me ha costado tomar en mi vida. No es fácil salir de la Real y venir al Athletic”, admitió antes de explicar que “si no lo hubiese tenido claro, no habría dado el paso”. “Es un paso adelante en mi carrera. Hay etapas en el fútbol que se acaban y pensaba que la de la Real se había acabado”.

La oferta económica del Athletic, que ya había intentado ficharle tiempo atrás, ha resultado irrechazable para el de Ondarroa, que coincidirá en el vestuario con su vecino Kepa Arrizabalaga. “Por supuesto que sí, que la oferta ha sido muy importante, pero con el contrato anterior de la Real tenía la vida resuelta. Es verdad que todo ayuda, que era una cantidad importante, pero vengo a un grande. Yo al Athletic siempre le he tenido como un grande. Aquí no vale quedar en mitad de tabla, hay que ser ambicioso e intentar estar en la clasificación lo más arriba posible”, expuso.

Asimismo, aclaró los motivos que en abril de 2014 le llevaron a poner en duda que el Athletic fuese a pagarle 30 millones de euros “al enemigo” para su fichaje así como a asegurar que “nunca” se iría “al otro bando”. “Entonces era joven”, comenzó su argumentación. “Pensaba así cuando aquello, pero las opiniones cambian y te das cuenta de muchas cosas. Ahí están las palabras que dije. No me arrepiento de lo que dije porque es lo que tenía en mente”.

Ahora, casi cuatro años después de sus palabras, Iñigo Martínez dijo estar “orgulloso” de ser el fichaje más caro en la historia del Athletic. Los 32 kilos invertidos suponen un récord para la entidad bilbaina, que bien podría haber tenido que desembolsar más dinero para fichar al central de Ondarroa, quien desveló que nunca ha sido “partidario” de las cláusulas anti-Athletic. “Cada uno decide qué poner en su contrato. Yo deje claro que no iba a poner una anti-Athletic. Nunca me ha gustado cerrarle las puertas a nadie. Quería decidir por mí mismo mi futuro y no estar condicionado por una cláusula. Hice mucho hincapié en ello en mi renovación”.

El de Ondarroa, que dijo no haber hablado aún con su nuevo entrenador, José Ángel Ziganda, se ejercitará esta misma mañana por primera vez con sus nuevos compañeros.

sin negociación Josu Urrutia, quien acompañó a Iñigo Martínez durante su presentación, agradeció el “paso” dado por el futbolista -“Iñigo es una apuesta importante como institución”, apuntó también- y desveló que no vieron “posibilidad de negociación” con la Real, por lo que directamente le trasladaron al conjunto txuri-urdin la decisión adoptada, que pasaba por pagar la cláusula. Asimismo, aclaró que “no es el futbolista mejor pagado” del conjunto rojiblanco.