BILBAO. Josu Urrutia se aferró a la línea de funcionamiento del club, que solo reconoce una operación de fichaje cuando está culminada, para eludir pronunciarse sobre la posibilidad de que algún refuerzo más se sume a la llegada de Aritz Aduriz e Ismael López: "Comunicamos las operaciones cuando están realizadas, igual que hemos hecho con estos dos jugadores. No voy a entrar en el terreno del rumor porque en estos temas de jugadores que se quedan o que vienen, eso no le haría ningún bien al Athletic".
Tampoco entró a valorar si la situación económica de la entidad bilbaina, que el propio presidente catalogó de "complicadilla", permite o no seguir buceando en el mercado, dejando pues una puerta abierta a futuras gestiones. Lo que vino a decir fue que si viene alguien más a la plantilla será la prueba de que existe capacidad para ello, y ahí se plantó.
Aparte de Ismael López y Aritz Aduriz han sonado otros nombres en la órbita del Athletic y alguna iniciativa ha habido, aunque estuviera encaminada únicamente a pulsar en qué parámetros económicos se movería un jugador determinado. En este supuesto se enmarcaría el caso de Beñat Etxebarria. El centrocampista del Betis, que en su primer año en la elite ha ofrecido un rendimiento notable, tiene en principio un precio prohibitivo. También se ha barajado la opción de Mikel Rico, si bien aquí no ha sido porque desde Ibaigane se haya dado pie a ello. Se trataría de una invención periodística, por cierto tal y como el propio interesado ha dado a entender en sus declaraciones.
Aún quedan muchas semanas hasta el arranque de la Liga, lo cual, unido a la discreción de que hace gala el club, induce a permanecer en guardia. En cualquier momento podría saltar la liebre, pero tampoco se puede descartar que no haya más caras nuevas en el grupo de Bielsa, al margen de quienes se incorporen procedentes del filial.
El presidente no quiso enjuiciar las circunstancias que propiciaron la salida de Aduriz e Ismael de Lezama, ambas producidas durante el mandato de su antecesor en el cargo: "Prefiero mirar al futuro y pensar en lo que nos van a aportar". Luego, explicó cuál ha sido el proceso que ha movido al Athletic a acometer sendas repescas. Negó que fueran solicitadas exclusivamente por Bielsa: "Es una cuestión que se trabaja en equipo. No había una exigencia expresa del entrenador, pero él habla a diario con Amorrortu, y decidieron que estas incorporaciones se debían hacer".
Esta fue la opinión del presidente en relación a lo que supone contar en adelante con Aduriz e Ismael López: "Estamos muy contentos de que hayan vuelto a casa. Van a elevar el nivel de competencia y a mejorar las prestaciones de la plantilla. Creo que Bielsa va a disponer de más alternativas en las posiciones de ataque, pueden ocupar varios puestos y van a enriquecer las ideas del entrenador. También les conocemos cómo son fuera del campo y eso ha influido para que estén aquí. Esperemos que les vaya bien porque eso será bueno para el Athletic".
En su breve intervención, Urrutia insistió en que las dos gestiones realizadas fueron anunciadas en cuanto estuvieron totalmente cerradas, a modo de explicación por lo tardía que fue la comunicación del fichaje de Aduriz, a última hora del martes, cuando al mediodía él ofreció una rueda de prensa en Ibaigane.
Quien cerró el acto fue Ismael López, quien no pudo disimular cierta tensión en sus turnos. Es evidente que no tiene el vuelo de alguien tan curtido como Aduriz, muy acostumbrado a lidiar con los medios. El navarro, quien posee ficha del primer equipo, se mostró muy humilde en cada respuesta. "Me ha venido bien este período de dos años fuera, aunque al principio lo pasé un poco mal. Creo que he mejorado a nivel futbolístico en todo, sobre todo en la forma de encarar los partidos y en la valoración posterior de los mismos, apartando cosas que no me convenían y que no me dejaban ser feliz. Creo que soy un jugador más completo y espero demostrarlo".
jugador vertical Ismael profundizó en su primera reflexión y dio a entender que en su anterior etapa en Lezama vivía demasiado obsesionado con hacer gol, lo cual le generaba insatisfacciones que repercutían en su juego, que ha superado: "Tengo características para jugar tanto por dentro como por fuera, aunque últimamente lo haya hecho más por fuera. Soy muy vertical con el balón y me gusta asociarme con los compañeros, antes solo miraba la portería. Soy polivalente, puedo jugar en todos los puestos de arriba y confío en ser una solución más para el entrenador".
En torno al episodio que le acercó al debut en el Athletic estando Joaquín Caparrós al mando, el navarro dijo: "Se me negó la posibilidad porque quizá no estaba preparado. Tuve un buen inicio de Liga y me llevaron al primer equipo, sí hubo pruebas, pero no hubo nada claro. El míster decidió que no jugase y el problema fue que cuando bajé al filial no estuve bien y eso se me juntó con una lesión de pubis. Eso ya está olvidado, ahora se me ha valorado y quiero demostrar que no se equivocan. Estoy feliz por regresar".
Relató cómo ya ha conversado con Urrutia y con José María Amorrortu, no así con Bielsa: "Ya me han dicho lo que esperan de mí. Quiero ir progresando poco a poco e ir aprendiendo de los buenos jugadores que hay aquí". Palabras que encajan con su condición de meritorio, pues no cabe olvidar que hasta la fecha Ismael ha militado en Tercera y en Segunda B, muy alejado del grado de exigencia que encierra desenvolverse en Primera División.
