Con la reconstrucción de los hechos se cierra este viernes una semana intensa en la Audiencia Provincial de Bizkaia en la que se ha intentado recabar todas las pruebas necesarias para esclarecer lo que sucedió la madrugada del 24 de septiembre de 2018 en la vivienda que compartían Maguette, Bara y sus dos hijas. Las cinco mujeres y los cuatro hombres que conforman el jurado popular han escuchado y visto las innumerables pruebas que han presentados las diferentes partes y también han podido escuchar el testimonio del único imputado, Bara N., de 39 años y marido de la víctima. Bajo su responsabilidad cae decidir si los hechos de los que se le acusan -asesinato y abandono de sus dos hijas menores- quedan o no probados, o por el contrario todo se desencadenó en legítima defensa, lo que rebajaría la pena considerablemente.

A lo largo de la semana han pasado por la sección primera de la Audiencia de Bizkaia diferentes testigos, agentes de la Ertzaintza encargados del caso, psicólogos y médicos forenses que han ido desgranando todos los elementos con los que pretende dar forma a lo que sucedió en la casa de Ollerías Altas y las razones que motivaron al fatal desenlance. Con todas las piezas ahora, el jurado popular deberá montar el puzzle de un suceso que sin duda generó gran impacto hace tres años en la capital vizcaina.

CUELLO SECCIONADO

Maguette Mbeugou fue hallada muerta en el salón de su casa, con el cuello seccionado en su totalidad y con al menos 83 heridas o lesiones inciso punzantes en las parte superior de su cuerpo, principalmente en tórax, cuello y cara. Murió asfixiada y según la principal hipótesis que se arroja de las pruebas y tras comprobar las numerosas heridas que presentaba en las manos, Maguette se intentó defender de su agresor. Estaba tumbada en un colchón y con una herida profunda en el cuello de unos 13 centímetros. Los forenses determinaron que todas las lesiones fueron "vitales", es decir que se produjeron en vida, y además se efectuaron "en un tiempo muy corto entre ellas", lo que hace "imposible valorar cuál fue la primera o la última".

La víctima, según el informo pericial presentaba "un cuadro de degollamiento muy grave, morfológicamente lo definiría hasta brutal, con la rotura bascular, rotura de línea aérea; el mecanismo de fallecimiento lo podemos considerar la pérdida masiva de sangre por la rotura bascular y por la rotura de la vía aérea un mecanismo un poquito mixto de tipo asfixia". Por el tiempo de heridas, el experto explicó que la principal hipótesis apunta a que el agresor podría estar colocado sobre la víctima, asestándole las puñaladas en las diferentes zonas del cuerpo. Esta hipótesis se contradice con la versión que dio el propio imputado, ya que este aseguraba que él se encontraba tumbado con sus dos hijas cuando fue atacado con un cuchillo por su mujer. De hecho, la propia médico que examinó a Bara.N, tras los hecho acaecidos relató el jueves que las heridas que presentada el imputado en la mano y la muñeca eran "erosiones" propias de "rozamiento" y de entidad clínica "muy leve". A su entender, es "muy poco probable" que se produjeran durante un forcejeo.

En cuanto a la herida que presentaba en el cuello la experta considera que "es más probable" que sea "autoprovocada" ya que es "superficial" y "uniforme en un recorrido de 10,5 centímetros sobre una superficie que tiene un elemento convexo", lo que es "difícil" en "una situación dinámica de forcejeo".ESTADO DE LAS DOS NIÑAS

Estos días también han prestado declaración los diferentes psicólogos que atendieron a las dos menores después de la muerte de su madre. Los expertos han explicado que las niñas presentaban síntomas afectación psicológica como sobreactivación, verborrea, pesadillas, signos de tristeza y aislamiento social en el caso de la hija mayor, y mutismo y "cara de tristeza" en el caso de la menor.

JUSTICIA

El hermano de Maguette Mbeugou pide "que la justicia sea justa"."El hecho está hecho y queremos que la justicia sea justa. Ella no va a volver a la vida", lamenta, para añadir que confía en que el juicio sirva para prevenir la violencia contra las mujeres.En este sentido, la familia de Maguette piensa que la verdad debe ir unida a la justicia y si no sabemos toda la verdad la justicia queda coja. Esta es nuestra intención y, a partir de ahí, ver si la verdad nos lleva a la reparación, que es lo que la familia desea".

La Fiscalía solicita para el procesado 25 años de cárcel, los mismos que la acusación particular, que también reclama otros tres años de prisión por maltrato y ocho más por abandonar a sus hijas con el cadáver de su madre. Asimismo, la acusación popular, en representación del Ayuntamiento de Bilbao, suma a su petición ocho años de prisión por las lesiones psicológicas que padecen las menores. Por su parte, la defensa del acusado reconoce un delito de homicidio con atenuante de legítima defensa, penado con 8 años de cárcel.