BILBAO. Minutos antes de las cinco de esta pasada madrugada, la Ertzaintza recibió el aviso de que había saltado una alarma de intrusión en una peluquería de la calle Castaños.

Una patrulla, mientras se dirigía al lugar, podía ver cómo, en la misma calle, dos individuos intentaban esconderse entre las sombras al detectar la presencia del vehículo policial.

Por este motivo, los agentes identificaron a los dos varones, de 20 y 22 años de edad, y en poder de uno de ellos, encontraron varias monedas y un teléfono móvil de marca Huawei.

Al mismo tiempo, en la peluquería otra patrulla comprobaba, juntamente con la propietaria del negocio, que la persiana de protección se encontraba forzada y que, en el interior, la caja registradora estaba tirada en el suelo, echando en falta la propietaria algo de dinero y un teléfono móvil de marca Huawei como el hallado en poder de uno de los sospechosos.

Por ello, los ertzainas detuvieron a los dos individuos, bajo la acusación de un presunto delito de robo con fuerza.