Bilbao - De los seis hombres de entre 18 y 36 años detenidos en la madrugada del viernes en Bilbao por, presuntamente, violar a una joven, dos están en prisión y cuatro en libertad con la obligación de presentarse cada día en el juzgado. Esta decisión causó estupor e indignación entre los ciudadanos y organizaciones vecinales.

La Federación de Asociaciones Vecinales de Bilbao reprochó ayer a la Justicia que dejara en libertad a cuatro de los arrestados por su presunta participación en una violación grupal de Bilbao y que los mismos puedan encontrarse con la víctima por la calle.

El presidente de la Federación de AA.VV., Carlos Ruiz, advirtió de la posibilidad de que los presuntos implicados en esa agresión sexual pudieran cometer hechos del mismo tipo o que tuvieran relación con otros delitos sexuales ocurridos recientemente en la capital vizcaina, si bien el Departamento vasco de Seguridad no confirmó este dato. Ruiz pidió a los jueces “más firmeza” contra quienes han cometido esos delitos, porque sus autores suelen repetirlos, “como se ha comprobado en el caso de la Manada”, individuos que acumulan condenas por hechos parecidos. “¿En qué está pensando la judicatura para dejar en libertad a cuatro de los arrestados? ¿Por qué hacen distingos?”, se preguntó. Si los seis participaron, “es el mismo delito y merecen el mismo destino: la cárcel”, opinó Carlos Ruiz.

El auto judicial

La sorpresa social ante la decisión del juez se sustenta aún más en el hecho de que el auto judicial que recoge el testimonio de la víctima de la violación múltiple ofrece verosimilitud y no genera dudas. Según este auto, al que tuvo acceso DEIA, la joven de 18 años, tal como se indicó en las primeras versiones de los hechos, había quedado a través de Instagram con uno de los miembros del grupo, del que no conocía el nombre. La chica esperó a esta persona en Abando con una amiga, luego se quedó sola y fue al Parque Etxebarria. Allí vio al grupo de seis hombres, que le infundieron miedo e intentó irse, pero uno de ellos la agarró del pelo y la tiró al suelo, ayudado por otros.

De los dos hombres que el juez envió a la prisión de Basauri, el auto señala que uno residía en Holanda (S. M. H.) y acababa de llegar al País Vasco, mientras que el otro (A. S.) llevaba pocos días en el Estado español, a donde habría viajado en patera. Estas circunstancias implican riesgo de fuga, de ahí que el juez decretara su encarcelamiento. De los otros cuatro el auto detalla que no pudieron ser identificados por la víctima como autores de la agresión. - B. Sotillo/Efe