BILBAO. Según ha informado la policía vasca, sobre las cinco y media de esta madrugada una patrulla de la Ertzaintza ha sido reclamada por un ciudadano para que se dirigiese hacia la Plaza Sakona.

Al hacerlo, los agentes podían ver cómo una mujer estaba golpeando un coche allí estacionado con una piedra de grandes dimensiones.

Al detectar su presencia, la mujer se deshacía de la piedra tirándola a una zona de hierba, de donde los ertzainas la recuperaban poco después.

El vehículo presentaba la luna trasera rota y daños en la delantera, además de un retrovisor fracturado y abundantes abolladuras y rayones por toda la carrocería.

Al preguntar a la mujer por el motivo de su comportamiento, podían comprobar que la mujer se encontraba bajo los efectos del alcohol. La sospechosa les aseguraba entonces que el vehículo era propiedad de su expareja, con quien tenía problemas personales.

Ante estos hechos, los ertzainas la han arrestado bajo la acusación de un presunto delito de violencia doméstica, por causar daños en el vehículo de su expareja.