Bilbao - Los dos menores de 14 años acusados de la muerte de Lucía y Rafael, el matrimonio de octogenarios residentes en Otxarkoaga asesinados el pasado mes de enero, han sido condenados a seis años de internamiento en régimen cerrado. Mientras tanto, el tercer acusado, que ahora tiene 17 años y fue incriminado por haber sido cooperador necesario, ha sido absuelto. De hecho, fuentes cercanas al caso, confirmaron ayer que este tercer menor -para quien la Fiscalía solicitaba la mayor pena, diez años de internamiento, según los tramos de edad que contempla el Ministerio público- está en libertad desde el martes, cuando la medida cautelar de ingreso en el centro de Zumarraga en el que permanecía desde que fue arrestado en enero quedó sin efecto.

El fallo de la sentencia recoge la máxima pena que podía aplicarse a los dos menores de 14 años -para quienes la Fiscalía pedía seis años de internamiento- al considerarlos culpables de un delito de homicidio y de robo con fuerza y violencia en casa habitada. Tras su puesta en libertad, el veredicto dictamina que estarán vigilados durante tres años. Asimismo, la resolución recoge que deberán responder “solidariamente” al pago de la indemnización por responsabilidad civil a los herederos de las víctimas por valor de 66.239 euros. Dicha cuantía deberán abonarla la Diputación Foral de Bizkaia -institución que tutelaba a uno de los menores en el momento de los hechos- y los progenitores del otro menor condenado.

Los hechos por los que se les ha inculpado tuvieron lugar entre las 9.00 y las 10.00 horas del pasado 18 de enero, cuando los dos menores accedieron por la ventana al domicilio de Lucía y Rafael, ubicado en la calle Zizeruena, con intención de perpetrar un robo. Una vez dentro, golpearon violentamente y atacaron con varias armas blancas a los dos ancianos de 87 años, que no pudieron oponer resistencia. La Er-tzaintza incautó varios cuchillos y encontró numerosas huellas dactilares que facilitaron el arresto de los dos menores de 14 años por su posible implicación. Posteriormente se arrestó al tercer joven, vecino de las víctimas, cuya participación pasó de considerarse secundaria en un inicio a que fuera juzgado como inductor de los hechos.

El juicio contra los tres acusados se desarrolló durante cinco sesiones a puerta cerrada -para preservar la identidad de los menores de edad- en el Juzgado de Menores Nº 2 de Bilbao entre el 13 y 21 de septiembre. Ayer se comunicó la resolución judicial a las partes, si bien la sentencia no es firme y podrá ser recurrida ante la Audiencia Provincial de Bizkaia. Durante la vista oral, los dos menores de 14 años ratificaron los testimonios realizados en la investigación y asumieron su participación en el crimen, alegando que iban “empastillados y borrachos” en el momento de los hechos. Asimismo, acusaron al menor de 17 años de haber sido el inductor del robo, cargo del que el tercer acusado se declaró inocente con la coartada de su madre, quien ratificó que estaba con ella en el momento de los hechos.

Los testimonios de los agentes que participaron en la investigación, así como el de los dos testigos protegidos, han sido concluyentes para determinar la implicación del menor de 17 años. De hecho, en la segunda sesión, uno de los ertzainas tumbó la versión de uno de los menores de 14 años, quien sostuvo que acudió al domicilio del tercer acusado tras cometer el crimen.