El Gobierno español ha intensificado las gestiones con Mauritania tras detectar que el 83% de las llegadas a Canarias en lo que va de año proceden de las costas de ese país para tratar de reducir la salida de embarcaciones “en una ruta extremadamente peligrosa”.

El Ejecutivo Sánchez constituyó ayer martes la Comisión Interministerial de Inmigración en una primera sesión a la que asistieron representantes de siete ministerios (seis ministros y una secretaria de Estado) y en la que se analizó un comienzo de año marcado por el incremento incesante de embarcaciones a Canarias y por el desbordamiento de los solicitantes de asilo en Barajas.

El ministro de Política Territorial y Memoria Democrática, Ángel Víctor Torres, presidente de la Comisión, explicó que la prioridad se centra en Canarias, dado que el 80% de la inmigración irregular que está llegando a España lo hace a través del archipiélago, según informa el Gobierno a través de un comunicado. Y el 83% de las embarcaciones salen desde Mauritania, por lo que el ministro de Asuntos Exteriores, Unión Europea y Cooperación, José Manuel Albares, aseguró que se ha intensificado la labor en ese país para tratar de reducir al máximo los cayucos que transitan “una ruta extremadamente peligrosa”. A falta de datos oficiales que Interior publicará cuando termine el mes, Canarias había recibido a fecha de 29 de enero 6.319 personas, casi un 16% del total de las que llegaron en 2023, cuando se contabilizaron 39.910 inmigrantes irregulares por mar a Canarias.

Los cayucos mauritanos llegan en buena medida a la isla de El Hierro, con una población cercana a las 11.000 personas, y que, como en la segunda mitad de 2023, vuelve a ser la que concentra el mayor flujo –el 55 % del total de llegadas– con el desembarco de 3.538 migrantes en 49 cayucos. Entre ellos viajaban 572 menores y 141 mujeres.

En la Comisión “se han planteado mejoras” para reforzar los equipos de atención de El Hierro, según Torres, quien ha afirmado que, en lo que se refiere a la atención a personas adultas, “la situación ha ido mejorando claramente con respecto a años anteriores”. “En estos momentos en Canarias la situación no es, ni mucho menos, de hacinamiento”, subrayó el ministro con datos del Ministerio de Inclusión, Seguridad Social y Migraciones que indican que los recursos habilitados por el Estado están ocupados al 55%. Situación distinta es la de los menores no acompañados, sobre la que se estudia jurídicamente la propuesta del Gobierno de Canarias para que sean acogidos en otras comunidades.