Las inclemencias climáticas han respetado la Semana Grande de Donostia en mayor o medida durante las cuatro últimas décadas. De hecho, para encontrarnos con una situación como la vivida en la noche de ayer miércoles, cuando las fuertes rachas de viento obligaron a suspender el espectáculo de fuegos artificiales, hay que retrotraerse hasta 1977. Fue entonces, hace 45 años, la última vez que el tiempo obligó a suspender el espectáculo pirotécnico.

Posterior a aquella ocasión, en 1985, los fuegos también se suspendieron, aunque por una razón mucho más dramática. Entonces, un accidente provocó que una japonesa saliera despedida hacia el público, causando la muerte de un niño y heridas graves a varias personas.

La Ley de Seguridad para Juegos y Espectáculos, prohíbe este tipo de exhibiciones cuando las rachas de viento superan los 36 kilómetros por hora

Según recoge la Ley de Seguridad para Juegos y Espectáculos, este tipo de exhibiciones están prohibidas cuando las rachas de viento superan los 36 kilómetros por hora. En el caso de la noche del miércoles, el medidor de la calle Ijentea marcaba a las 22.45 horas (cuando se inician los fuegos) el viento soplaba a 65 kilómetros por hora.

A consecuencia del temporal, Fully Fused Firework se marchará de Donostia sin mostrar su espectáculo de fuegos artificiales. Así lo recoge el contrato que las pirotécnicas participantes firman con Donostiako Festak, en el que se explica que, en el caso de que el show sea suspendido por inclemencias meteorológicas, la empresa no lanzará sus fuegos en otra fecha, sino que tendrá que recoger su material y le será abonado aproximadamente el 60% del caché.

La empresa británica no lanzará los fuegos y cobrará el 60% del caché, según recoge el contrato firmado con Donostiako Festak

Asimismo, el tiempo obligó a suspender el miércoles los conciertos programados para la noche. Con respecto a la jornada de hoy, el Ayuntamiento de Donostia ha explicado que "se irán tomando decisiones acto a acto".