Anunciarse el fin del confinamiento municipal en la CAV y empezar a sonar los teléfonos de los alojamientos turísticos fue todo uno. "El viernes, después de la reunión del LABI, fue una locura y el sábado y el domingo, también. La mayoría de la gente no sabe que las normas sanitarias se volverán a revisar a final de mes y están reservando a saco", afirma Juan Luis Sáez, presidente de la Federación de Campings de Euskadi, que estima en un 90% el alquiler de bungalós de cara a Semana Santa, mientras que el de parcelas, más condicionado por la meteorología, rondaría el 60 %.

Estas cifras, sin embargo, no son para echar las campanas al vuelo. "Viendo el aluvión de llamadas", Sáez cree que abrirá algún camping más de los cinco que ya tenían previsto hacerlo, pero teme que este oasis en sus negocios sea"pan para hoy y hambre para mañana". "Lo primordial tendría que ser salvar el verano, no la Semana Santa, que son cuatro días, y a ver qué hacemos el resto de abril y en el mes de mayo", apunta.

En la Asociación de Agroturismos y Alojamientos Rurales Nekatur, donde las reservas se han disparado de un 25 a un 71% para esas fechas festivas, se muestran más optimistas. "La subida ha sido muy destacable. Nos ha sorprendido. Sí que preveíamos que pudiera haber un aumento en pocos días, pero en ningún caso de tal calado", reconoció la gerente, Idoia Ezkurdia, quien cree que podrían acercarse, con el transcurrir de las semanas, al 88% de ocupación registrado en la Semana Santa de 2019, último año de referencia.

En este sector, con el vacío a sus espaldas, la sensación es de respiro. "La mayoría son autónomos con familias detrás y han estado sin actividad. De alguna manera es un alivio, un punto de partida para poder empezar a trabajar", valora Ezkurdia, quien detalla que "lo que más nos han demandado son apartamentos o casitas pequeñas de alquiler íntegro para cuatro personas o más, siempre y cuando sean convivientes, pero también se están haciendo reservas por habitaciones". En este último caso todas las plazas del alojamiento pueden estar ocupadas, pero en las zonas comunes el aforo está limitado al 50%, por lo que se establecen horarios para desayunar.

Donde no esperan clientes, de momento, es en las casas de alquiler íntegro de gran capacidad. "Hay un porcentaje de establecimientos de 18 o 20 plazas que todavía no pueden trabajar. Aunque ajustaran el precio, es muy difícil que solo cuatro personas puedan pagarlo", señala la gerente de Nekatur, quien advierte de que están siendo "muy escrupulosos revisando todas las peticiones para comprobar que son de la CAV y que cumplen el máximo de personas permitido". "Hemos tenido solicitudes de grupos grandes y las hemos rechazado", afirma. Con un horizonte impredecible, Ezkurdia solicita, "como sector, que se vaya acelerando la vacunación para que se controle la situación sanitaria y las medidas se vayan flexibilizando" con el fin de "llegar a un verano en el que podamos recibir también clientes del Estado y del extranjero, que cada vez son más importantes para nosotros". De hecho, precisa, "en 2019 un 20% de nuestro cliente fue extranjero".

"Mucha incertidumbre y riesgo"

Juan Luis Sáez, gerente del camping Zumaia, no las tiene todas consigo. Y eso que, con vistas a la Semana Santa, ya tiene "los bungalós llenos y bastantes reservas de parcela". Ahora toca cruzar los dedos, hacer números y que no salga a perder. "Sacar a ocho empleados del ERTE, hacer acopio de género para el bar y la tienda... No me salen las cuentas. Es mucha incertidumbre y mucho riesgo para cuatro días. Mientras los extranjeros no se muevan más, es muy complicado", reconoce. Tanto que ni siquiera tiene claro aún que vaya a poder abrir sus instalaciones, por lo que ofrece al cliente "cancelación gratuita sin anticipo". "Veremos cómo evoluciona la situación, qué tiempo va a hacer y valoraremos. Si van subiendo otra vez los contagios y salvan la Semana Santa, pero luego no puedes trabajar en abril...", comenta, sin saber todavía a qué atenerse, pero con la certeza de que "si no se salva el verano, muchos negocios van a caer porque no puedes aguantar mal dos años. Nosotros, que tenemos hipotecas y demás, llevamos ya seis meses cerrados", lamenta.

"A la juventud se la caza rápido"

Pese a que la limitación de reunión a cuatro personas se ha difundido por tierra, mar y aire, todavía hay quien no se quiere dar por enterado. "Hay gente que pide cinco parcelas, seis bungalós... y ya sabes que vienen para juntarse. Les informas de las restricciones y ya tienes problemas. Los propietarios no podemos estar como policías haciendo que la gente cumpla las normas", señala Sáez, quien aclara que en su camping solo dejan reservar una parcela o bungaló por cliente. "Luego que los otros hagan otra ya no lo puedes evitar. Tendremos que estar cada dos por tres con un guarda controlando el tema", asume y confía en que "en los fines de semana que quedan hasta Semana Santa la gente quite las ansias de salir y se sosiegue porque si no, va a traer cola". Entre quienes aspiran a arrimarse más de la cuenta, dice, hay un poco de todo. "A la juventud, por las preguntas que nos hacen, solemos cazarla enseguida, pero otros son familias con hijos que en la calle andan en cuadrilla y quieren salir todos juntos. Falta concienciación todavía", advierte.

Este próximo fin de semana, augura Sáez, que preside la Federación de Campings de Euskadi, "los centros comerciales, tiendas y demás estarán a rebosar. Es como una prueba porque el virus se manifiesta en un plazo máximo de quince días. Para el veintitantos se sabrá si han subido los contagios y nos dirán algo. Esperemos que sea bueno".

Casas Rurales en la CAV

Semana Santa. Según los datos que maneja Nekatur, la media de ocupación para los cuatro días es del 71,19%, frente al 87,75% de 2019. Las noches con más reservas son las del 1,2 y 3 de abril, mientras que el 4 bajan considerablemente.

Semana de Pascua. La ocupación prevista es del 18,7%, "muy inferior" al 30,7% de 2019.

Puente de San José. Se prevé una ocupación del 32%, cuatro puntos más que hace dos años.

90%

La ocupación de bungalós del 1 al 5 de abril es del 90% y la de parcelas, del 60%. En Pascua bajan al 20 y 10%, respectivamente.

"Lo que más nos han demandado son apartamentos o casitas para cuatro personas"

"La mayoría han estado sin actividad; esto es un alivio, un punto de partida para empezar a trabajar"

Nekatur

"Lo primordial tendría que ser salvar el verano, no la Semana Santa, que son cuatro días"

"Hay gente que pide cinco parcelas, seis bungalós... No podemos estar como policías"

Federación de campings de Euskadi