pamplona - El Parlamento Europeo (PE) ratificará hoy, además de otros nueve sistemas de seguridad, el acuerdo para que todos los turismos y furgonetas ligeras que salgan de fábrica a partir de 2022 cuenten obligatoriamente con un limitador de velocidad inteligente, el Intelligent Speed Assistance (ISA).

La medida fue aprobada el pasado 21 de marzo por el comité del PE, que busca prevenir con el nuevo paquete de medidas de seguridad más de 25.000 muertes entre 2022 y 2037, el equivalente al número de personas que mueren cada año en las carreteras europeas. Concretamente, en España podrían ahorrarse, según la Fundación Mapfre, 400 accidentes mortales al año.

Este sistema impedirá a los vehículos nuevos superar los límites fijados en las carreteras europeas y reducir de este modo los accidentes provocados por circular a demasiada velocidad.

Lo hará utilizando la señal GPS y las tecnologías de videocámaras que lean las señales de tráfico para adaptar automáticamente la velocidad al ritmo de circulación. El ISA regula la velocidad del vehículo de forma similar a los reguladores de velocidad existentes, en trayectos largos de autopista o autovía, para evitar que el conductor tenga que estar pisando y soltando constantemente el acelerador.

Este operativo ya existe en algunos coches, como el Ford Focus, dado que el Euro NCAP, el programa europeo de evaluación de seguridad de automóviles, incentivó premiando con puntos extra a las compañías que lo incluyesen. Asimismo, está por ver si el sistema permitirá que quien conduzca pueda anularlo puntualmente pisando a fondo el pedal de aceleración para realizar una maniobra de adelantamiento, por ejemplo. Este gesto tendría que ser repetido por el conductor cada vez que arranque, dado que se activa con el encendido.

reacciones No obstante, la posibilidad de desconectar el dispositivo “rebaja la eficacia del asistente de velocidad inteligente, pero sigue siendo un avance importante para los conductores que lo utilicen”, comentó Jorge Ortega, experto en seguridad vial de la Fundación Mapfre.

Por su parte, la Asociación de Constructores Europeos de Automóviles aplaudió este acuerdo, aunque abogó por que dichas medidas vayan acompañadas de una mejora de las infraestructuras viarias y campañas de sensibilización de seguridad vial.

Este perfeccionamiento también lo apoyaron las asociaciones de conductores, que mostraron cierto desencanto con el ISA, que se podría apagar temporalmente, dado que todavía tiene un margen de error del 10% y las cámaras que incorpora el vehículo pueden fallar en zonas con obras, del mismo modo que será necesrio que el GPS tenga en todo momento los datos actualizados sobre el tráfico.

Desde los fabricantes de vehículos, que diseñan coches que llegan hasta los 260 kilómetros por hora, ya adelantaron que la medida supondrá un encarecimiento del precio de los vehículos. El coste total previsto para los fabricantes de vehículos ascenderá a 57.400 millones de euros, mientras que los beneficios en ahorro sanitario se cifra en 72.800 millones.

Además del ISA, la Eurocámara tiene previsto aprobar hoy nuevos requisitos para los test de colisión, la instalación obligatoria de sistemas de asistencia al conductor -incluido el Frenado Automático de Emergencia (AEB)-, el sistema de mantenimiento de carril, y un nuevo estándar de visión directa para autobuses y camiones, que permitirá a los conductores tener una mejor visión de las personas que están en la carretera alrededor de su vehículo para eliminar los ángulos muertos y salvaguardar a los usuarios más vulnerables.

Asimismo, también se está planteando incorporar como obligatorios un sistema de desbloqueo de arranque del motor con etilómetro para comprobar que el conductor está sobrio, así como el montaje de una caja negra que almacene datos de funcionamiento del vehículo para que, en caso de que se produzca un siniestro, se puedan documentar sus causas, o un mecanismo de advertencia de la somnolencia y de la distracción del conductor, medidas que ya incorporan algunos vehículos. - D.N.

El funcionamiento. En primer lugar, el coche recibe la información de la posición por GPS, así como el límite de velocidad en cada momento gracias a un mapa digital, lo cual se puede combinar con las videocámaras para el reconocimiento de señales. En segundo lugar, el límite de velocidad se muestra en el salpicadero. Cuando este se ha alcanzado, el coche ayuda a no superarlo.

30%

El asistente inteligente de velocidad podría reducir las colisiones en un 30% y, los fallecimientos, en un 20%. Asimismo, los automóviles con este sistema podrían reducir las emisiones de CO2 un 8%.