ERC ha avanzado la parte de la fianza que pide el Tribunal de Cuentas a todos los afectados que tenían responsabilidades en el Govern entre 2016 y 2017, incluido Carles Puigdemont, han explicado fuentes republicanas.

Según ha avanzado La Vanguardia, ERC avalado parte del importe total que pide el Tribunal de Cuentas, después de que este organismo rechazara el jueves los avales presentados por la Generalitat a través del Institut Català de Finances (ICF).

Así, los republicanos han avanzado "la parte correspondiente a los gastos imputables" a todas las personas encausadas por el Tribunal de Cuentas y que estuvieron en el Govern entre 2016 y 2017, cuando se impulsó el 1-O y ERC lideraba la acción exterior de la Generalitat, por lo que han pagado la fianza de todos los excargos de esos años sean o no de su partido.

La cifra de este pago asciende a unos dos millones de euros, que el partido ha pagado para evitar el embargo de todas las personas afectadas que tuvieron responsabilidades en el Govern de JxSí liderado por Puigdemont.

El líder de ERC, Oriol Junqueras y el exconseller Raül Romeva son algunos de los beneficiados junto a Puigdemont, pero quedan excluidos todos los afectados por esta causa que formaron parte del Govern entre 2011 y 2016, cuando los republicanos no estaban en el Ejecutivo catalán, como es el caso del expresidente de la Generalitat Artur Mas o el exconseller Andreu Mas-Colell.

Recursos al Tribunal de Cuentas

Las defensas de los afectados ya han anunciado que presentarán los recursos necesarios ante el Tribunal de Cuentas, pero han defendido que "la prioridad ahora es evitar los embargos".

Por eso, los republicanos han querido actuar con rapidez "para evitar la afectación personal y familiar de decenas de personas", de manera que han avanzado el pago de la fianza a todos esos excargos y, según las fuentes de ERC, lo han hecho en coordinación con el resto de organizaciones afectadas.

También han apuntado que otros afectados están depositando bienes inmuebles para pagar estas fianzas, como ha hecho Mas presentando su vivienda, pero que "se desconoce si podrán servir para que el tribunal detenga los embargos, vista la arbitrariedad y la celeridad con la que actúa el Tribunal de Cuentas".

Critican que el Tribunal de Cuentas no acepte ningún plazo para depositar los pagos y que los embargos puedan ser inminentes, y tachan esta causa contra la acción exterior de la Generalitat de ser una "cacería económica sin precedentes".