Más de la mitad de los vascos considera que la independencia puede ser la opción más deseable para Euskadi. Para un 21% de los ciudadanos, esta es la opción más deseable, mientras que un 32% expresa que su apoyo a la independencia está condicionado a las circunstancias en las que se produjese este proceso. Así se desprende del último Sociómetro publicado por el Gobierno vasco, realizado entre los días 17 y 21 del pasado més mediante 3.333 entrevistas telefónicas. La encuesta refleja también un crecimiento de los ciudadanos que rechazan la independencia (41%), mientras que un 6% opta por no responder ante la posibilidad de apoyar o no la vía independentista.

En cuanto al interés por la política, el 63% dice que le interesa "poco o nada", frente al 36 % que tiene bastante o mucho interés en ella. Dos tercios de los vascos confiesan además sentirse nada o poco próximos a los partidos políticos, que suspenden todos ellos en las notas que les dan los encuestados.

La mayor puntuación la obtiene el PNV (4,8 puntos sobre 10), seguido del PSE-EE (3,9), EH Bildu (3,7) y Elkarrekin Podemos (3,5). Los menos valorados son PP+Ciudadanos (1,8) y Vox (0,7).

Con respecto a los líderes políticos, Iñigo Urkullu logra un 5,3, seguido de la portavoz parlamentaria de EH Bildu, Maddalen Iriarte (5). A continuación figuran Idoia Mendia (PSE-EE) con 4,6, Miren Gorrotxategi de Elkarrekin Podemos (4,5) y finalmente Amaia Martínez de Vox (2,3) y Carlos Iturgaiz de PP+Cs (2,0).

Pese a estos resultados, un 53 % de la población se muestra muy o bastante satisfecha con el funcionamiento de la democracia en la CAV, porcentaje que se reduce al 23% en cuanto al funcionamiento en el Estado.

Preguntados por los principales problemas de Euskadi predominan los relacionados con el mercado laboral (un 68 % los menciona dentro de los tres principales problemas), en segundo lugar los vinculados a la pandemia (39 %) y les siguen la situación política (20 %), los problemas económicos (18 %), la sanidad (18 %), la vivienda (10 %) y los relativos a la inmigración y el racismo (6 %).

Preguntados por su propia situación, los vascos consultados dan un 6,9 al momento actual pero perciben una tendencia de mejora, ya que a la situación de hace un año le otorgan un 6,3 mientras que a la que tendrán en 2022 le dan un 7,2. También sobre la situación de Euskadi son optimistas. Ahora la puntúan con un 5,6 puntos, frente al 5,2 de 2020 y suben al 6,3 para dentro de un año.

Más negativa es su visión sobre la situación en el Estado, con 4,5 puntos actualmente, 4,1 hace un año y 5,1 para el próximo.