En el gran panel de control para hacer seguimiento del diálogo con el Gobierno español, cada vez se encienden más luces que indican que hay materias en proceso de negociación. Tras el encuentro entre el lehendakari Urkullu y el presidente Sánchez, también se han reunido ya el consejero de Hacienda, Pedro Azpiazu, y la ministra María Jesús Montero. Según ha podido saber DEIA, en la cita, que tuvo lugar el 17 de febrero en Madrid, el jeltzale pidió a la ministra que reconduzca el modelo de gobernanza de los fondos europeos, y que convoque a la mayor brevedad la Comisión Mixta del Concierto Económico para concertar dos impuestos que tendrían que haber quedado ya resueltos porque entraron en vigor a finales de enero: transacciones financieras (conocido como tasa Tobin) y servicios digitales (tasa Google). Los equipos técnicos trabajan en estas dos figuras. Están analizando los puntos de conexión entre el Estado y las haciendas forales, y Azpiazu no quiere que se demore más de lo necesario, porque va al meollo de la singularidad foral y la capacidad para recaudar impuestos. Hasta entonces es una incógnita el dinero que podría recaudar Euskadi por estas tasas.

El Gobierno español prevé recaudar más de 1.800 millones con estos dos impuestos. La tasa sobre los servicios digitales está pensada para empresas como Google o Amazon. Gravará a las grandes empresas tecnológicas con un 3% de sus ingresos obtenidos por publicidad, intermediación en línea y transmisión de datos. Por este impuesto, Google quiere repercutir el dinero con subidas a las empresas que usen su servicio para anunciarse, y Amazon se ha dirigido a las empresas que venden a través de su plataforma. La tasa de las transacciones financieras, por su parte, grava con un 0,2% la adquisición de acciones en las empresas con capitalización bursátil por encima de los mil millones de euros, entre las que figuran Iberdrola, Euskaltel y Gestamp.

fondos

Azpiazu planteó también a Montero que reconduzca la gestión de los fondos europeos. El Estado tiene ya preasignados unos 70.000 millones, y las instituciones vascas aspiran a recibir 5.700. Esta petición la pone sobre la mesa en una doble dirección. Por un lado, quiere que brinde capacidad de decisión a las comunidades para que decidan a qué proyectos destinan el dinero. Azpiazu aprieta porque ve margen hasta que la lista de proyectos se cierre a finales de abril, pero no se ocultan las dificultades para maniobrar en los proyectos de 2021 en la medida en que el Estado ha cerrado algunas cuestiones con la Unión Europea. Va a tener un mayor margen para los proyectos de 2022 y los años venideros.

Por otro lado, en un ámbito más centrado en el procedimiento, pone en valor que Euskadi tiene propuestas PERTE que implican a varias consejerías, lo que encaja con el enfoque transversal que quiere dar la Unión Europea, frente a la intención del Gobierno español de gestionar las peticiones desde cada ministerio, disgregando y fraccionando las medidas, lo que obligaría después a reagrupar esas iniciativas desde Euskadi.

Azpiazu pone en valor la solvencia de la comunidad a la hora de gestionar fondos y su elevado grado de ejecución, de manera que el dinero que entrega Europa no va a perderse por el desagüe. Además, esgrime la experiencia con la I+D+i, que ha aplaudido la presidenta de la Comisión Europea, Ursula Von der Leyen. La reunión con Montero transcurrió con "buen tono".

TASAS

Los impuestos estrella del Gobierno PSOE-Unidas Podemos. Los impuestos que quedan por concertar, conocidos como tasas Google y Tobin, son dos de las medidas impulsadas con especial publicidad por el Gobierno español PSOE-Unidas Podemos. Entraron en vigor a finales de enero, y se anunció que las liquidaciones comenzarían en febrero, aunque las haciendas forales vascas aún no tienen un acuerdo para su concertación. Azpiazu pide convocar la Comisión del Concierto.