La gestión desde Euskadi de las prisiones que se sitúan dentro de su territorio es una realidad cada vez más cercana. Los gobiernos vasco y español han dado pasos decisivos para certificar el traspaso de esta competencia el próximo marzo, como aparecía recogido en el calendario de transferencias puesto al día en octubre. Ambos ejecutivos han avanzado en la redacción de un borrador que “acerca las posturas sobre los términos” para realizar esta transferencia, lo que además “reafirma la voluntad de llevarla a cabo” por parte del gabinete de Pedro Sánchez, ya que este compromiso vuelve a aparecer por escrito en este documento y con las especificidades técnicas necesarias.

Así lo avanzó el miércoles el Departamento de Gobernanza Pública y Autogobierno que dirige la consejera Olatz Garamendi, que puso el foco en las “intensas conversaciones de las últimas semanas” con el equipo de la ministra de Política Territorial, Carolina Darias, que ahora suena con fuerza para sustituir a Salvador Illa al frente del Ministerio de Sanidad tras confirmarse el salto de éste a la política catalana. Este trabajo febril no es para menos ya que, según recordaban desde el Gobierno vasco, la competencia de prisiones es “la de mayor calado” de las doce que están incluidas en el primer bloque del calendario de traspasos previsto para marzo. En otras también se han producido avances, es el caso del código bibliográfico ISSN y el transporte por carretera.

Sin embargo, lo mollar está en las prisiones, ya que en el texto de trabajo de las dos administraciones se incluyen las “normas constitucionales, estatutarias y legales que allanan y promueven el cambio de titularidad” de esta competencia. Para las próximas semanas queda “concretar las funciones y servicios” que asumirá el Gobierno vasco, junto con las “condiciones, derechos y obligaciones de las instalaciones y los medios personales”.

Según la consejería de Garamendi, queda un arduo trabajo por delante que incluye establecer la forma en que se traspasará la gestión de los centros penitenciarios, junto con el seguimiento del cumplimiento de penas y programas de tratamiento y clasificación de los internos. Ambos departamentos estudiarán a su vez “las vías para hacerse cargo de la parte sociolaboral, acción social, educación y prevención y rehabilitación de drogodependencias” en la población reclusa. Recordaron que, pese a este traspaso, la legislación en materia penitenciaria seguirá siendo cosa del Estado, al tiempo que se posibilitarán “medidas de coordinación”.

Las conversaciones también abordarán el traspaso de los inmuebles, el mobiliario, los equipos y el material a transferir, así como el personal que trabaja en los centros penitenciarios ubicados en la CAV y su regulación laboral. Todas estas cuestiones se trabajarán en mesas técnicas y con la participación de los departamentos sectoriales implicados, como el Departamento de Igualdad, Justicia y Políticas Sociales del Gobierno vasco.

Meteorología

Además de la competencia de prisiones, las doce incluidas en el primer bloque del calendario de traspasos incluyen a su vez el Ingreso Mínimo Vital (IMV), el transporte por carretera o la asignación del ISSN. En este primer tramo figuran asimismo el traspaso de las competencias sobre meteorología, seguros agrarios, servicios privados de seguridad, el fondo de protección a la cinematografía, mercados de productos de la pesca, seguros, paradores de turismo y la ordenación y gestión del litoral.