La pandemia del covid-19 no discrimina a nadie y obliga a todos a cambiar rutinas y protocolos. También al Parlamento Vasco. Su devastadora irrupción ha dejado en evidencia algunas normas de funcionamiento que los parlamentarios quieren enmendar. El primer paso lo dieron ayer en el primer pleno ordinario de la legislatura en el que aprobaron por unanimidad la reforma del reglamento interno para que a partir de ahora se puedan celebrar plenos y comisiones no presenciales en circunstancias extraordinarias, como una pandemia. Además los parlamentarios podrán emitir sus votos de forma telemática en determinados casos.

Todos los grupos del Parlamento Vasco aprobaron ayer la modificación del reglamento interno. La pandemia puso en jaque a la Cámara durante las pocas sesiones de la Diputación Permanente celebradas en los últimos meses en los que se tuvo que habilitar de manera especial con el reloj de las elecciones autonómicas vascas en marcha, primero el 5 de abril y luego, definitivamente, el 12 de julio. Al aforo reducido se tuvo que añadir la votación telemática de los parlamentarios, un supuesto que solo estaba contemplado en los casos de baja maternal o paternal. La propuesta presentada por el procedimiento de urgencia y de lectura única por parte del PNV, EH Bildu, PSE y Elkarrekin Podemos-IU, también fue respaldada por PP+Ciudadanos y la única representante de Vox.

A las primeras de cambio, y ya con el Parlamento a pleno rendimiento tras su constitución y la formación del Gobierno vasco, se ha procedido a reformular el reglamento, de modo que incluirá la posibilidad de convocar reuniones telemáticas o no presenciales, ampliará los supuestos en los que el voto puede ser delegado y recogerá la posibilidad de votar a distancia.

La convocatoria de sesiones telemáticas deberá ser solicitada por dos grupos parlamentarios o por la quinta parte de los miembros del Parlamento, siempre y cuando circunstancias extraordinarias impidan la normal presencia de los parlamentarios.

La delegación de voto solo estaba recogida en caso de maternidad o paternidad, pero en adelante se ampliará al embarazo, los ingresos hospitalarios o enfermedades graves, así como por situaciones excepcionales que impidan la normal presencia en la Cámara y no puedan cumplir su deber de asistir a los debates y votaciones del pleno. En estos casos podrán delegar su voto en otros parlamentarios.

En el caso de la baja maternal o paternal posterior al parto, también cambia el periodo que es posible delegar el voto. Si hasta ahora la duración era de seis semanas, en adelante será la Mesa del Parlamento la que decida cuánto puede prolongarse. La delegación de voto deberá realizarse mediante escrito dirigido a la Mesa.

El parlamentario del PNV Iñigo Iturrate destacó la "fácilidad" con que se logró el acuerdo, mientras que desde EH Bildu Eba Blanco subrayó que "ante situaciones excepcionales hay que tomar medidas excepcionales". Por su parte, el parlamentario del PSE Eneko Andueza reconoció que el reglamento necesita otras modificaciones que no considera "urgentes", por lo que serán presentadas por "otra vía".

Desde la coalición PP+Cs, Carmelo Barrio señaló que el "complicado y lamentable" trabajo de la Diputación Permanente durante la pandemia ha puesto de manifiesto la necesidad de "clarificación y orden" en cuestiones que afectan al funcionamiento de la Cámara. La parlamentaria de Vox, Amaya Martínez, explicó que considera "adecuado" que la Cámara se adapte a las nuevas situaciones creadas por el covid-19.