WASHINGTON. La joven activista sueca de 16 años Greta Thunberg, que se ha convertido en un icono de la lucha contra la crisis climática, mandó ayer un mensaje a las autoridades estadounidenses al asegurar frente a la Casa Blanca que sus demandas para combatir el cambio climático no pararán. “Nosotros continuaremos. Nos vemos la semana que viene, el (viernes) 20 de septiembre”, advirtió Thunberg a las puertas del jardín sur de la residencia presidencial de EE.UU. ante los 200 estudiantes que se sumaron ayer a las protestas conocidas como los Viernes para el Futuro.

La joven activista se refería a la concentración del próximo día 20 en Nueva York, en el marco de una protesta a nivel mundial para llamar la atención a los líderes del mundo sobre la emergencia climática, con motivo de la celebración de la Asamblea General de la ONU, donde participará un centenar de jefes de Estado y de Gobierno. Este movimiento estudiantil fue iniciado por Thunberg en agosto de 2018, cuando decidió faltar a clase todos los viernes para ir a protestar ante la sede del Parlamento sueco hasta que se adoptaran medidas más enérgicas para combatir el cambio climático.

En la versión que organiza cada viernes un grupo de niños frente a la Casa Blanca, la joven activista no quiso ser protagonista y se mantuvo en segundo plano a lo largo de la manifestación.

En su intervención, Thunberg se refirió a las demandas que hicieron sus compañeros de protesta sobre la necesidad de una acción “inmediata” para evitar que las consecuencias de la crisis climática sean todavía más grandes.

Uno de los oradores fue Jonah Gottlieb, de 17 años y director ejecutivo de la Campaña Nacional de los Niños de EE.UU, quien aseguró que acciones como la de ayer “envían un mensaje al mundo entero y al establishment (poder establecido)”. “Estamos contra el sistema de opresión. Ellos (poder establecido) saben que vamos a por ellos (...) ¡Este es nuestro planeta y estamos aquí para quedarnos!”, exclamó Gottlieb, cuya familia fue víctima de los incendios en el norte de California el verano pasado.

Otra de las participantes, Nadia Nazar, de 16 años y fundadora del movimiento Zero Hour (Hora Zero), alertó de que “no queda tiempo” para hacer frente a la crisis climática. “No nos queda tiempo. Necesitamos tomar medidas y responsabilizar a las grandes corporaciones. El cambio climático es la mayor amenaza de nuestra era”, apuntó.

La activista Ella Jacobs, de 16 años, reclamó al presidente estadounidense, Donald Trump, que “escuche a la ciencia y las pruebas que tiene delante”.

El mandatario ha dicho en varias ocasiones que el cambio climático es “un engaño” y en 2017 anunció la salida de EE.UU. del Acuerdo de París.