La tercera edición de Musika Km0 concluyó el pasado diciembre con el concierto final de los tres vencedores, en la sala Kupula del Teatro Campos Elíseos de Bilbao. Allí, uno de los protagonistas, Iker Sanz, tuvo la responsabilidad de arrancar el concierto y lo hizo de forma casi experta, adentrándose en pensamientos y reflexiones antes de cada canción.

Así sonó 'A Escondidas de la luna - parte I', de Iker Sanz

Así sonó 'A Escondidas de la luna - parte I', de Iker Sanz

El cantautor, entre la dulzura de su voz y la delicadeza acústica de la canción de autor, interpretó ‘A escondidas de la luna’, una historia de cuernos que en su garganta tiene dos visiones —y dos canciones—: el anverso, el de la pareja femenina infiel, en clave Tontxu y con teclado, y el reverso herido del hombre engañado, esta ya más airada, en una onda cercana al sonido de Fito y Fitipaldis que necesita más instrumentación en vivo. Así de bien sonó entre las paredes del Teatro Campos.