PARÍS. Las aguas corren turbias y agitadas por el Senna. Francia rechazó hoy en duros términos las fuertes críticas formuladas el martes por la comisaria europea de Justicia, Viviane Reding, contra las masivas expulsiones de gitanos.
"Esta forma de descarrilamiento es improcedente. La paciencia tiene sus límites. ¡Así no se trata a un gran Estado!, dijo el secretario de Estado francés de Asuntos Europeos, Pierre Lellouche, a le emisora RTL.
Pierre Lellouche calificó de "patinazo" las declaraciones de la comisaria europea de Justicia, Viviane Reding, en las que comparó la política de Francia de expulsión de gitanos con la situación de la Segunda Guerra Mundial.
"Como hijo de alguien que luchó por la Francia Libre no puedo permitir a la señora Reding que diga que la Francia actual se parece a la de Vichy, no se puede hablar de Segunda Guerra Mundial", aseguró Lellouche a la emisora RTL.
Reding se mostró muy critica con la política gala de expulsión de gitanos y anunció que la llevará ante la Corte de Justicia de la Unión Europea.
"Pensaba que en Europa no volvería a ser testigo de este tipo de situaciones después de la Segunda Guerra Mundial", afirmó la comisaria.
"Quiero creer que su pasión ha superado su pensamiento", aseguró el secretario de Estado.
Lellouche fue muy duro con Reding a quien reprochó esta comparación. "Un billete de avión para un país de origen de la UE no es un tren de la muerte, no son las cámaras de gas", aseguró el responsable francés.
"Ese patinazo al que ha puesto voz no es conveniente", agregó Lellouche.
El secretario de Estado indicó que la Comisión Europea tiene derecho a recordar a cada país cuáles son sus obligaciones pero "no puede erigirse en censora de los Estados", agregó.