El Surne Bilbao Basket trabaja desde este lunes en su centro de operaciones del Bilbao Arena dando los primeros pasos para preparar el curso baloncestístico 2022-23, en el que competirá en la Liga Endesa y en la Basketball Champions League. Al equipo vizcaino le esperan seis semanas de pretemporada, tiempo para ensamblar un nuevo engranaje, crear dinámicas, aclarar roles, crecer en la parcela física y crear una coraza que le permita ser competitivo.
Son días para que las caras nuevas conecten con las que continúan y se generen esos mecanismos de compañerismo que muchas veces marcan la diferencia. En ese sentido, nuevos fichajes como Nikola Radicevic, Francis Alonso, Xabi Rabaseda, Ignacio Rosa y Michale Kyser trabajan ya junto a ‘veteranos’ como Andrew Goudelock, Tomeu Rigo, Álex Reyes (ha entrenado al margen del grupo) y Jeff Withey en compañía de chavales de la cantera que ayudarán al equipo durante estas semanas: Aiert Velasco, Asier Fernández, Elvis Ude, Unai Barandalla e Iñigo Betolaza. Ludde Hakanson, Denzel Andersson y Emir Sulejmanovic se incorporarán al grupo cuando terminen sus compromisos con sus respectivas selecciones.
NUEVO CICLO
Evidentemente, esta pretemporada va ligada al cambio de ciclo generado por la salida del club de Álex Mumbrú. Ahora el Surne Bilbao Basket es responsabilidad de Jaume Ponsarnau y el técnico catalán ha mostrado este martes cuáles quiere que sean las líneas maestras de este nuevo proyecto. “Aún estamos entrenando sin contacto, esperando a que los jugadores cojan la forma para poder dar ese paso tan importante en un deporte como el nuestro. Nos estamos encontrando muy buena predisposición, los jugadores quieren conectar con lo que queremos hacer y también entre ellos. Queremos que lo que para nosotros es un buen ‘roster’ se vaya convirtiendo en un buen equipo”, ha afirmado
Sobre la composición final del grupo, Ponsarnau ha destacado que “creemos que hemos construido una plantilla que, si no hay lesiones, tiene unos mínimos altos y eso es muy importante para competir. No renunciamos a crecer más. Los máximos van a llegar si trabajamos, si conectamos, si la atmósfera del equipo es buena… Poco a poco trataremos de consolidar estos mínimos para acercarnos a nuestros máximos”.
CRECER COMPITIENDO
En este sentido, jugar la BCL puede tener mucha importancia. “Nuestra realidad es que vamos a jugar en Europa y eso te permite crecer compitiendo, pero muchas veces no entrenando. Por eso tenemos que aprovechar ahora al máximo para todo lo referente a construir desde los entrenamientos. Pero también debemos aprovechar para conocernos más y acertar cómo defender, cómo atacar, a que conceptos agarrarnos…”, ha explicado, incidiendo en que “una de las cosas importantes de la pretemporada es construir los roles. Antes de fichar un jugador tienes que hablar con él y en esas conversaciones ya le orientas sobre su rol, pero el rol no solo lo tiene que dar un entrenador, sino que el jugador se lo tiene que ganar y demostrarlo delante de sus compañeros en el trabajo del día a día, en los amistosos… Eso irá marcando nuestra orientación táctica y las responsabilidades para ser un equipo lo más largo posible”.
BALONCESTO DINÁMICO
Preguntado por el estilo de juego que quiere implementar en el Surne Bilbao Basket, el técnico catalán no ha escondido que “yo siempre he intentado jugar dinámico y que desde el dinamismo haya pase. En el cómo llegar a eso probablemente habrá matices diferentes. Defensivamente, la cultura de la ACB ha cambiado y mi filosofía se tiene que adaptar. En este sentido, hemos hecho un equipo para poder adaptarnos”.
Sobre la exigencia que puede generar jugar competición europea, ha sido claro al reconocer que “tenemos que acertar con la forma de hacer las cosas para que nos afecte de un modo positivo, para que nos dé nivel competitivo, ritmo… Que nos haga mejores de lo que seríamos solo entrenando. Hay que gestionar muchas cosas como el tono físico, las cargas… Ser muy rígido en este sentido”. En referencia al calendario, “yo siempre pienso que es el que es. Lo bueno es conocerlo para poder planificar y orientar las cosas. Sí que hay una cosa que no me gusta, que es empezar jugando viernes, domingo y martes. Eso nos preocupa un poquito porque es una exigencia física máxima de arranque”
RIGO Y RABASEDA, CAPITANES
Esta primera de contacto también ha servido para introducir en el grupo a Sergio García, nuevo entrenador ayudante junto a Javi Salgado, al argentino Cristian Lambrecht, nuevo preparador físico, y conocer la condición de cocapitanes que estrenan Tomeu Rigo y Xabi Rabaseda. “Tomeu tiene un conocimiento máximo del club, de la ciudad y del territorio y valoramos su mentalidad. Es un jugador que ha tenido mala suerte con las lesiones, pero su tesón y su mentalidad le han permitido mantenerse en este club. Creemos que nos puede ayudar con esta responsabilidad. Y qué voy a decir de Xabi y los partidos que lleva en esta liga y en Europa. Tiene la experiencia de haber estado en muchas dinámicas y es un gran cohesionador de grupos”, ha destacado Ponsarnau.
