Los cuadros ya no son los únicos elementos a tener en cuenta a la hora de decorar las paredes de casa. Hace un par de temporadas fueron los espejos los que protagonizaron muchas imágenes, convirtiendo las paredes en grandes lienzos que mostraban pequeñas y grandes colecciones. Pues bien, siguiendo esta idea, son ahora los platos los que recuperan su protagonismo como elemento decorativo. Una vez más, las viejas tendencias se reinventan buscando alternativas creativas y originales.

Para sumarse a esta idea y crear un rincón especial en el hogar, tan solo es cuestión de juntar una pequeña colección de platos con cierto valor, ya sea por la historia que tengan detrás -piezas de vajillas antiguas, regalos...- como por su diseño colorido y vistoso.

Pero, ¿dónde encontrar estos platos para crear paredes tan bonitas como las que se muestran en las tiendas de decoración y en las redes sociales? Que algo se ponga de moda hace que muchas firmas, como Zara Home, Westwing, Anthropologie, etc. saquen diseños bonitos y con precios razonables a sus colecciones.

Pero si lo que se pretende es encontrar piezas realmente especiales, nada mejor que echar un vistazo al trabajo que hacen empresas especializadas, ya sean firmas de toda la vida, esas con trayectorias centenarias y que pueden presumir de no haber abandonado su forma de trabajar artesanal a lo largo de su historia, como Loza Heritage o Sargadelos; o también apostar por la denominada cerámica de autor, una tendencia en alza que recoge el trabajo de jóvenes artistas que han surgido en los últimos años y que han logrado convertir su pasión por la cerámica en su profesión, como Andrea Zarraluqui, Chichinabo -la firma tras la que se encuentra Patricia Lázaro-, Los platos de Pan -de Bárbara Pan de Soraluce-, Nuria Blanco, Bonjour -de Elena Meseguer-...

A la hora de plantear un diseño en la pared, hay que buscar una zona adecuada, que puede ser desde una pared principal, como las del recibidor o del salón, hasta otras más olvidadas, como una zona de paso o un baño. La versatilidad de los platos como elemento decorativo hace que encajen bien casi en cualquier rincón.

A la hora de su colocación, la clave está en preparar una composición bien pensada, que puede jugar con líneas armónicas y que sigan, por ejemplo, una gama cromática o un tema -animales, flores, caras, motivos geométricos...- o simplemente apostar por la versión más ecléctica, dejando volar la imaginación y jugando con platos de diferentes tamaños, diseños y colores.