La corta trayectoria de Hyundai, treinta años en el mercado español, no impide constatar su gran transformación, que ha convertido aquella modesta marca en esta firma puntera que hoy apuesta por las últimas tecnologías. Su director general recuerda que ya en 2017 lanzaron el modelo inicial de “la submarca IONIQ, primero en su género con tres tecnologías”. Ahora llega el IONIQ5, “un coche muy tecnológico y con un diseño supermoderno”, nueva referencia del segmento 100% eléctrico. “El 53% de lo que vendemos está electrificado, somos la única marca en ofrecer modelos con las cinco tecnologías de electrificación (híbrida, híbrida ligera, híbrida enchufable, eléctrica y pila de combustible de hidrógeno)”.

El apoyo del grupo Hyundai a la sostenibilidad se plasma en “inversiones de 60.000 millones de euros en electromovilidad entre 2020 y 2025. El objetivo es alcanzar la neutralidad en carbono para 2035. Vamos a lanzar seis modelos eléctricos de todos los segmentos antes de 2025”.

Satrústegui reconoce, no obstante, que “no se está consiguiendo velocidad en este paso a la electromovilidad”. Por tanto, dice, “adaptaremos nuestra oferta a la demanda del mercado, que está apostando por modelos híbridos”. ¿Soluciones? “La oferta eléctrica ya existe; hace falta inversión en infraestructuras de recarga, que es insuficiente. Faltan también beneficios para quien opta por conducir un eléctrico: ayudas deducibles del impuesto de la renta, parkings y peajes gratuitos, un IVA cero…”

Afirma, rotundo, que “la transición a las nuevas tecnologías ha de ser ordenada, para que el parque, con una edad media de 13 años, se renueve”. Considera poco realista “pretender que un cliente con un coche de 20 años se compre un eléctrico, que tiene otro precio distinto, no tan competitivo como uno de combustión”.