Muchos restaurantes de menú del día enfocados a trabajadores de su área "tendrán que cerrar". O adaptarse a la comida a domicilio una vez que el teletrabajo se ha implantado durante la pandemia y, en buena parte de los casos, se mantendrá en el tiempo.

Así se puso este viernes de manifiesto en la jornada telemática Del restaurante al escritorio organizada por Teletrabajo Fórum, que reunió a cocineros y expertos en digitalización de empresas para analizar el impacto de la "nueva normalidad laboral" en el sector.

Borja Infante, director de Operaciones del Grupo Cronos, señaló que el teletrabajo hace que "la gente coma en casa, durante la pausa establecida en su empresa, en vez de en los restaurantes" por lo que son "muchos" los locales que basaban su oferta en el menú del día para ellos que tendrán que cerrar o adaptarse.

Por ello les animó a implantar nuevos servicios de comida a domicilio para los teletrabajadores, algo que no sólo beneficiaría a los restaurantes, sino también a quienes operan en este modelo de trabajo remoto y que "a veces no tienen mucho tiempo para cocinar, lo que les permitirá organizarse mejor la jornada laboral".

Por su parte, el director de la consultora gastronómica Brandelicious, Rodrigo Varona, señaló que esta tendencia se está implantando cada vez más y da a los clientes la oportunidad de probar en sus casas comidas de restaurantes que nunca antes se habían planteado el servicio a domicilio, algunos incluso con estrellas Michelin, "aunque la experiencia no sea la misma" que la que se vive en el local.

Si no se dispone de capacidad en el local, una buena opción son las dark kitchens o cocinas fantasmas, espacios en los que se elabora comida para enviar a domicilio a través de las plataformas de reparto y que reproducen las recetas propuestas por los restaurantes, recordó el experto en digitalización del sector Carlos Rodríguez-Maribona.

"Son una evolución del mercado para restaurantes que no tienen capacidad de hacer comida a domicilio en sus cocinas", explicó quien reconoce que existen "problemas administrativos" en este apartado "porque la administración no sabe dónde encajarlas", aunque prevé que "se irá normalizando".

También apuntó como opción de futuro la robotización de las cocinas, dirección que ve a medio plazo para la comida rápida pero que considera viable en el futuro para otras, con "un cocinero de innovación trabajando desde cualquier parte del mundo para que un robot replique sus recetas a la perfección".