LA asociación de nuevos y jóvenes diseñadores españoles (Ande), una entidad sin ánimo de lucro, cuya finalidad es la promoción y divulgación del trabajo de los nuevos talentos de la moda estatal, acaba de seleccionar a Rubén Reyes (Gasteiz, 1989) para representar a Euskadi en la final que se celebrará en Madrid a finales de septiembre en la 34ª edición de los Premios Nacionales a la Moda para Jóvenes Diseñadores que se vienen fallando ininterrumpidamente desde 1985.

Este año, el vencedor tendrá las clases pagadas para cursar un máster en gestión de empresas de moda, que imparte Esden Business School, la escuela de negocios internacional con sede en Madrid, Bilbao, Barcelona y México D.F. Además, participará con un estand en una feria internacional donde tendrá oportunidad de confrontar sus ideas con otros diseñadores que también luchan por abrirse paso en este sector. Y, sobre todo, logrará una mayor proyección, lo que haría que Reyes esté más cerca de su mayor sueño: el de tener su propia tienda física, pese a que ya tiene una on line y vende sus creaciones en comercios multimarca. Entre ellos, el gazteiztarra Ríos Moda.

En concreto, en esta gran final el jurado valorará tres aspectos fundamentales de la colecciones que se presentan: innovación/creatividad, posibilidades de comercialización y materiales y confección. “Yo, si te digo la verdad, es que todavía estoy como que no me lo creo”, explica todavía emocionado este joven que se fue de Vitoria para estudiar moda en la escuela de diseño IADE, de Madrid. Sus prácticas, en 2011, las hizo donde otro alavés, en el departamento creativo de Debota & Lomba, donde colaboró en los desfiles para una de las grandes pasarelas, la de Madrid. Con esta conocida marca también “hice también algo para novias y comuniones” y luego, junto con unos amigos, fundó Lesmoking, “que presentamos en la Pasarela Gasteiz On y me dieron el premio a diseñador revelación (2014)”, recuerda con orgullo sobre esta firma basada en el “patronaje de caballero, pero reinterpretada en el propio cuerpo de la mujer”.

En 2018, Reyes se atrevió a abrir su propia firma de costura, RR, que lleva sus propias iniciales “porque al final si trabajas ocho horas, no tienes tiempo para dedicárselo a nada y menos a otra empresa, así que me tomé mi proyecto personal en serio y decidí que era el momento de trabajar para mí mismo y lo que me apasiona, que es mi firma”, destaca.

Precisamente, los diseños de su propia firma son los que han llevado a Reyes hasta esta final de Madrid, tras imponerse sobre unos 40-50 proyectos que se han presentado en total en toda Euskadi. “Me mandaron un email en el que me comunicaron que había sido seleccionado para representar al País Vasco”, detalla este diseñador que hace una colección anual. “Nos dirigimos a trajes de fiesta, invitada, incluso hacemos novia, aunque, en ese caso, son más vestidos a medida”, aclara. Se inspira mucho en los libros o en el cine, pero sobre todo viajando, porque “el ver otras culturas, el ver otra forma de vestir, me inspira muchísimo y me da la oportunidad que durante un año pueda tener un proceso de creación para poder tener diferentes ideas y poder montar una colección para la siguiente campaña”. Es por ello que su trabajo “no tiene que ser algo tan metódico como que en un mes tengas que saca una colección”, destaca.

Así, su firma RR sobresale por su minimalismo, “que te sugiere esa elegancia de la mujer que intento plasmar en mis diseños y también en la ropa que hago. Todas las prendas se entremezclan haciendo looks para una mujer poderosa y con estilo”.

Reyes pretende que se pueda ir a la oficina con una de sus camisas y con un vaquero “y que luego de repente, lo puedas combinar con un blazer para ir a un afterwork monísima, es decir, que puedes combinar todas esas prendas y darles un estilo totalmente diferente. Es lo importante porque intento hacer en mis diseños algo real para que pueda decir que yo todo esto me lo pondría”, concluyó.