Los incapaces

SI hay una carpeta de eventos lamentables que en el departamento no conseguimos reducir de expedientes es la de la violencia machista. No hay día que no se sume uno nuevo. Los que se conocen y los que no. Porque no hace falta salir en los programas de la bilis o en los informativos para padecer un evento lamentable en este apartado. Ni hace falta una cuchillada o que a un joven se le vaya la pinza y decapite a la mujer a la que hasta el día anterior juraba amar hasta la muerte. Esa obsesión que él padecía y que les trajo la muerte a los dos tiene mucho de discapacidad emocional. La inmadurez no tiene edad y los caracteres más débiles son los más tendentes a la violencia para afrontar lo que no se sabe digerir. Un no, un adiós, un hasta aquí hemos llegado o un vete a la mierda. La mentalidad primaria -en ocasiones incluso primate- de no entender el principio de igualdad. Ya sé que tú no quieres, pero te puedo. Y te quiero tanto que tienes que dejarme. Y, si no me dejas, eres una zorra y a mí no me vas a dejar en ridículo. Y aquello de que se entere de que yo no soy un pelele que tenga que hacer o dejar de hacer lo que quieren porque ellas lo digan. Pues sí, amigo maltratador, un pelele eres. Incapaz de controlar tus instintos y mantenerte por encima de la delgada línea que separa al animal superior del animal inteligente. Tú te sientes muy superior pero eres un zote. Eres un terrorista en tu casa porque utilizas el amedrentamiento como método para obtener tus fines contra la voluntad mayoritaria de tus congéneres. Porque la voluntad mayoritaria de las mujeres en sus decisiones individuales es la de cada una de ellas. Como la voluntad mayoritaria de los hombres es la de cada una de ellos. Más allá de las lecciones de quienes confrontan contra el ‘heteropatriarcado machirulo’ o contra el ‘feminazismo’. A ver si empezáis a desmontar un lenguaje que os engorda el ego pero os desprecia unos a otras y empezáis a practicar la convivencia que os hace equivalentes. Ellos de rosa, ellas con corbata. Todos contra los abusadores. Panda de incapaces.