El apuñalamiento de cuatro personas este jueves en Dublín, tres de ellas menores, ha provocado disturbios en la ciudad, en los que "maleantes" de "extrema derecha" han aprovechado este incidente para atacar a la Policía irlandesa (Garda), según la fuentes del orden.

El máximo responsable de la Garda, Drew Harris, explicó que un número de agentes ha sido atacado con fuegos artificiales, botellas y otros objetos en la zona donde un hombre apuñaló hoy a una mujer y a tres menores, uno de los cuales, una niña de cinco años, se encuentra en estado grave.

El dirigente policial calificó estas protestas de "vergonzosas" y aseguró que están impulsadas por "una facción de gamberros" de "ideología de extrema derecha".

Harris pidió a la ciudadanía que ignore "los rumores" que circulan en la redes sociales sobre la identidad del atacante, ya que se trata de "información malintencionada" diseminada por grupos "para sus propios fines".

La Garda informó este jueves de que el ataque con arma blanca ocurrido en el centro de Dublín "no está relacionado con el terrorismo" y que podría tratarse de un hecho "aislado".

En una comparecencia ante los medios, el superintendente de la Garda Liam Geraghty indicó que la investigación trata ahora de establecer los motivos por los un hombre de unos 50 años, detenido en mismo lugar del ataque, apuñaló hoy a la mujer, los tres menores y se hirió también a sí mismo con un arma blanca.

El responsable policial explicó que el sospechoso atacó a un número de personas poco después de las 13.30 horas GMT de hoy en una zona muy transitada del norte de la capital y próxima a una guardería.

Entre los heridos figura una niña de cinco años que se encuentra en "estado grave" y una mujer de unos 30 años, trabajadora del centro escolar, que recibe tratamiento por "lesiones graves", mientras que los otros dos menores están fuera de peligro.

Según Geraghty, el supuesto agresor, cuya identidad no ha trascendido, también está hospitalizado con heridas de arma blanca y está siendo interrogado para esclarecer los motivos del ataque, por lo que instó a la ciudadanía a mantener la calma y "evitar juicios" prematuros.

En declaraciones a la cadena pública irlandesa RTE, Siobhan Kearney, testigo del suceso, explicó cómo trato de ayudar, con la asistencia de otra ciudadana, ante una situación de calificó de "absoluto caos".

"Miré hacia el otro lado de la calle y vi al hombre y los gestos de acuchillamiento ante muchos niños, por lo que crucé la carretera. El hombre acababa de acuchillar a dos niños", relató la testigo.

Kearney destacó que varias personas "trataron de atacar al sospechoso" y que ella y otra "señora estadounidense" formaron un círculo "alrededor del hombre".

"Tres minutos después -agregó- llegó la ambulancia para llevarse a los niños y después otra ambulancia y bomberos para ocuparse del hombre en el suelo".

La zona del ataque ha sido acordonada para facilitar los exámenes forenses.

La Garda ha indicado que "tiene una línea de investigación definida" en marcha y que no está buscando de momento a alguna otra persona en relación con el ataque.