Las instituciones vascas y la organización calculan que el pelotón de la Grande Boucle moverá alrededor de 5.000 personas que se tendrán que hospedar en Bilbao y alrededores a lo largo de esta semana. Para buena parte de esta cifra de visitantes, la organización del Tour ya cerró las reservas hoteleras poco después de que se hiciera oficial la salida desde Euskadi. Una ingente marea compuesta por los integrantes de los 22 equipos ciclistas que participan en esta edición del Tour junto a sus técnicos, mecánicos y ayudantes que suman cerca de 450 acompañantes.
También llegarán los próximos días miembros del staff del Tour, cientos de periodistas que seguirán la serpiente multicolor, representantes de las seis importantes marcas que patrocinan la vuelta gala, operarios, miembros de la caravana publicitaria, agentes de seguridad y un largo etcétera. Buena parte de todo este tropel ya tiene asignado su hospedaje como, por ejemplo, parte de la organización que se alojará en el Ercilla y periodistas que, entre otros hoteles. se alojarán en el NH Deusto y en el NH La Avanzada.
La que todavía es una gran incógnita es dónde descansarán los 176 ciclistas antes de que se lleve a cabo su presentación este jueves y empiecen a pedalear, aunque casi es seguro que estarán repartidos entre los hoteles de más alto standing de la ciudad. Una revolución para el sector hotelero durante unos días por la salida del Tour en Bizkaia que tiene una segunda derivada quizás mucho más importante, la rodada y huella que va a dejar su estancia en los que vengan a Bilbao y Bizkaia para el evento.
Como indica el concejal bilbaino “esperemos que todos los alojamiento puedan funcionar bien y dejen un buen recuerdo entre sus clientes”. Ponía como ejemplo “un periodista internacional que venga a cubrir la salida del Tour, gente de la organización o de los equipos que llegan para atender la prueba o disputarla, después, tras conocernos, podrán volver con sus amigos y familias. Ese será un retorno que reconoceremos a más medio o largo plazo”.