Mario Vaquerizo y Alaska fueron los invitados de anoche en ‘Joaquín, el novato’ de Antena 3. En esta emisión, las entrevistas fueron de forma paralela: mientras Joaquín Sánchez charlaba con la cantante mexicana, Susana Saborido hacia lo propio con el colaborador televisivo. En este último programa, la mujer del exfutbolista fue ‘novata’ dirigiendo este espacio. Una velada que estuvo marcada por las confesiones de Vaquerizo sobre temas personales. 

En los últimos tiempos, el vocalista de las Nancys Rubias ha causado gran polémica con algunas de sus opiniones acerca de diversos temas. Por ese mismo emotivo, Susana Saborido se interesó en saber cómo lleva Mario Vaquerizo las críticas. “Yo las llevo mal por el daño que le puedan hacer a mi madre, porque hablan sin saber. Además, me están dando una importancia que ni yo mismo me la doy”, contestó el también colaborador de televisión a la mujer de Joaquín Sánchez. No obstante, Vaquerizo subrayó que no teme a los “comentarios hirientes”, sino que se crece. A continuación, confesó que lo que más le ofende son aquellos que ponen en duda su orientación sexual. “Todos mis amigos son maricones. No son gays, son maricones. Esto no lo estoy diciendo como un insulto. Porque el insulto no está en la palabra, sino en la intención de cómo lo dices”, puntualizó Vaquerizo, antes de explicar la razón por la que le duelen estos ataques.

“Lo que me da rabia es que están cuestionando a mi mujer. ¿Qué pasa, que mi mujer es una muñeca? ¿Mi mujer se va a morir de inanición? La estás cuestionando a ella. Por un lado, estás diciendo que Alaska es la mujer más inteligente de España, ¿pero después va a ser una tonta en casa? Eso es lo que de verdad me enerva”, exclamó Mario Vaquerizo, visiblemente enfadado. Además, el también cantante señaló que, aunque las críticas no le duelen demasiado, sí que le “afectan” por su mujer y su familia. Vaquerizo añadió que no comprende por qué cuestionan su relación con Alaska por “hablar en femenino y ponerse rulos”. Aun así, Vaquerizo es muy consciente de que exponerse a la opinión pública conlleva someterse a críticas. 

Sin complejos

Mario Vaquerizo aprovechó para decir que “tener educación” es lo único que pide a sus detractores: “Si yo no te pregunto, que piensas de mí, no me lo tienes que decir”, aseveró el cantante. De todos modos, el invitado desveló que, cuando lo llaman “maricón”, es cuando más “suelta pluma”. Así lo contó el marido de Alaska: “No lo veo ningún defecto, pero llega un momento que pienso 'Chico, la broma ya está bien’”.