Fátima Hacine, madre de Santi Coca, se mostró “relativamente satisfecha” (aunque “escrito con letra muy pequeña”) por la condena de uno de los cuatro acusados del homicidio de su hijo, al tiempo que lamentó de que el resto “se libre”. “Simplemente no puede ser”, insistió ayer martes Hacine en declaraciones a Efe.

Hacine valora que, “dentro de lo poco que se ha juzgado”, la pena impuesta “se aproxime” a la petición de cuatro años que reclamaron la Fiscalía y el resto de acusaciones. No obstante, se halla “bastante disgustada” porque, a su entender, “si el argelino hubiera estado en el juicio” es posible que “teniendo en cuenta el contexto el resultado hubiera sido otro”. Lamentó en este sentido que, por distintos supuestos errores, el fugado no haya podido ser extraditado para ser juzgado a pesar de haber sido interceptado en Francia. Respecto a la posibilidad de recurrir la sentencia condenatoria ante el TSJPV, Hacine lo deja en manos de la Fiscalía, aunque desveló que el Ayuntamiento, que ejerce la acción popular, es favorable a ello.