Síguenos en redes sociales:

Uno de cada cuatro incendios en Bilbao se da en viviendas y el modo de actuar salva vidas

Los bomberos, que recomiendan cerrar las puertas en caso de fuego en un piso, recibieron 700 avisos el año pasado

Uno de cada cuatro incendios en Bilbao se da en viviendas y el modo de actuar salva vidasJosé Mari Martínez

Bilbao - “Las puertas nos salvan la vida. Cerremos todas las puertas”. Con este contundente mensaje de un bombero del cuerpo municipal, el Ayuntamiento de Bilbao apeló ayer a la responsabilidad de los propios ciudadanos frente a un incendio en su domicilio. El consejo no está de más teniendo en cuenta que el año pasado el 28% de los avisos por fuego recibidos se produjeron en edificios de viviendas: concretamente 196 de entre las 700 llamadas registradas. Los Bomberos de Bilbao tuvieron que actuar en 66 domicilios, y aunque no hubo que lamentar ninguna muerte como en 2017, cuando fallecieron cinco personas, 48 personas resultaron heridas el año pasado.

El objetivo del Consistorio bilbaino es que esa cifra no suba de cero, por ello lanza una campaña con 150.000 ejemplares de un Infobilbao que será distribuido en todas las viviendas de la villa, centros municipales, polideportivos y bibliotecas, con el fin de ofrecer consejos ante un incendio en un hogar o en un edificio. “Sería interesante que se tomaran medidas antes y durante un incendio. La diferencia entre un pequeño susto o una tragedia puede ser saber qué hacer al respecto”, aseguró Tomás del Hierro, concejal de Seguridad Ciudadana, durante presentación de la iniciativa que ofrece consejos relacionados con situaciones de fuego en la propia vivienda, por si el fuego se encuentra en los pisos inferiores o superiores, en caso de que el edificio sea de estructura de madera y para saber qué hacer una vez en el exterior del inmueble.

Por su parte, Andoni Oleagordia, director de Protección Civil y Emergencias, repasó las cifras de 2018, año en el que se produjeron un 10,45% más avisos por incendio que en 2017. El año pasado se contabilizaron 700 avisos por incendios -en vía pública, maleza, vehículos, edificios, instalaciones eléctricas...-, mientras que el año anterior fueron 634. Según concretó Oleagordia, los avisos por incendios que más se contabilizaron el año pasado fueron por incendios en la vía pública -basura, contenedores, mobiliario urbano...-, con 276 avisos. Después, le siguieron las llamadas por incendios en edificios, con 196; fuegos en otro tipo de edificios -hostelería, comercios, inmuebles industriales o docentes, garajes...-, con 77 avisos; incendios en maleza, con 57 salidas; fuegos en vehículos, con 49 llamadas; incendios en instalaciones eléctricas, con 18 avisos, y 27 llamadas por otro tipo de fuegos.

El director de Protección Civil también detalló que los incendios relacionados con edificios en vivienda se mantienen en los últimos años en cifras similares. El año pasado fueron 196 avisos, mientras que en 2017 se produjeron 161 y hace tres años se contabilizaron 181. De esos 196 avisos, 66 fueron algún tipo de fuego en los domicilios, por lo que tuvieron que actuar los bomberos, con el resultado de 48 personas heridas. Concretamente, 85 salidas fueron salidas sin intervención por parte del personal de bomberos y veinte fueron falsas alarmas que, según Oleagordia, “no fueron intencionadas”. En ese sentido, concretó que pueden derivarse de avisos porque un transeúnte ve que sale polvo de una ventana o porque alguien huele a humo en la escalera.

Cuestión de tiempo “El factor tiempo es muy importante”, aseguró el director de Protección Civil y Emergencias, quien indicó que desde que el Ayuntamiento inició la campaña en 2017, han sido colocados cerca de 400 detectores de humo en hogares de personas que viven solas o matrimonios de más de 80 años y en viviendas de personas con diversidad funcional. Del Hierro detalló que una vez que los bomberos reciben una llamada, tardan una media de siete u ocho minutos en llegar.

El tiempo de reacción es importante, pero no tanto como seguir las advertencias adecuadas en cada caso. Fernando Sancho, bombero de Bilbao, desaconsejó cruzar un fuego y recomendó cerrar las puertas del domicilio en caso de incendio, ya que “cualquier puerta resiste más de una hora y media”. En esa línea, declaró que “la habitación más segura es la que está más lejos del fuego”. Y desmitificó creencias como que el baño es el habitáculo con menos riesgo o que poner toallas mojadas bajo la puerta aumenta la seguridad.

Desde su experiencia, Sancho indicó que “el ser humano actúa por instinto. No se pone a reflexionar sobre el hecho de que al huir te pones en riesgo. Queremos apagarlo porque creemos que va a destruir la vivienda. Pero hay que pensar qué es más importante”. Asimismo, recomendó no avisar a los vecinos, “para no generar pánico”.