COMO si Federico Jiménez Losantos escribiese con seudónimo en el Frankfurter Allgemeine, el diario de referencia alemán se mofa de las ministras españolas y publica una página corrosiva, analizando los trapitos de las representantes del Ejecutivo español, a las que cataloga de socialistas fashionistas. Un reportaje que retrata el Gobierno de España como un desfile de modelos y dibuja en La Moncloa un showroom de la pasarela Cibeles. Titulado Las muñequitas de la moda de Zapatero, habla de "un conjunto de mujeres cuya vanidad les hace estar más preocupadas de su aspecto que por cumplir el ideario socialista".
El artículo comienza por Bibiana Aído, a la que bautiza como la señorita papá, que soy ministra. Una definición que habría podido firmar el propio Jiménez Losantos, ya que sugirió, a raíz de su nombramiento, que para acceder a la cartera ministerial "había ganado un concurso de peteneras". Tampoco se salva Ángeles González Sinde, de la que se critica su estampa de la tópica España: sevillanas y toros, en un intento de promocionar eternamente el flamenco con sus vestidos de volantes gipsy look. A la ministra de Sanidad, Trinidad Jiménez, la encasilla como la típica señora pija que compra en la Milla de Oro de la calle Serrano y se ceba con Fernández de la Vega, a la que llama por el apodo, totalmente comprensible en alemán, De la Vogue, en referencia a su glamourosa aparición en esa revista.
Aunque ellas son el centro del irónico análisis, la edición dominical de este rotativo se ensaña con el nuevo estilismo progre de los socialistas. "Cuando llegan al poder se vuelven chic y aparcan la chupa de cuero. Entre los hombres, lo primero que desaparece son las camisas estampadas o de cuadros, después las patillas, algunos pendientes y finalmente las cazadoras de cuero con las que se encontraban tan a gusto". El Frankfurter Allgemeine señala que, a pesar de la crisis, todos tienen tiempo de ocuparse intensamente de su indumentaria. Al único que perdona, por su elegancia, es al presidente Zapatero, "lo que hace más incomprensible -dice- que sus hijas apareciesen en la Casa Blanca como si fueran a una fiesta de Halloween". Incluso los fantasmas del pasado, añade, se interesan por la moda, en referencia a Felipe González, que recientemente ha presenciado con su novia algún pase de modelos.
Firmado por Leo Wieland, el artículo esboza un Ejecutivo ZP fashion que utiliza a diario modelos de diseño. Desde el smoking de la ministra de Defensa, Carme Chacón, una creación de Purificación García, a las sofisticadas gafas de Pepe Blanco, detalla toda una larga lista de momentos en los que la moda eclipsa la actuación de los altos cargos del Estado español, a los que califica, de estrellas de la democracia. Y, a su lado, lamenta todavía con más retranca, la barba totalmente pasada de moda de Rajoy, "un auténtico desastre".
Además del gobierno del PSOE, y como daños colaterales, menciona a Duran i Lleida, del que destaca que tiene unas gafas distintas para cada día del año, y a Soraya Sáenz de Santamaría, a la que recuerda en su pose sexy para un diario de tirada nacional con un sugerente vestido de gasa.
Tras la afrenta, María Teresa Fernández de la Vega y Leire Pajín están indignadas. Según la vicepresidenta, el artículo es "completamente irrespetuoso, ofensivo, intolerable y antiguo". "No sólo es conservador, sino que pertenece a épocas que felizmente tenemos superadas", agrega. La secretaria de Organización consideró que todo el mundo tiene que haberse sentido indignado por "esa forma de dirigirse a las ministras, que denota un machismo que hay que combatir". Pajín confía en "el rechazo rotundo de todas las fuerzas políticas ante ese escrito, porque no se puede tolerar ni en la política ni en la vida -ha enfatizado- que a una mujer se le falte al respeto por el hecho de ser mujer".