El PP mantiene su línea de confrontación con el lehendakari y el PNV, y ahora acusa a Imanol Pradales de “hacer el trabajo sucio” al presidente español, Pedro Sánchez. El líder de los populares de la comunidad autónoma vasca, Javier de Andrés, recrimina al lehendakari que no haya confirmado aún su presencia en la conferencia de presidentes autonómicos con el argumento de que no puede haber “vetos ni imposiciones” en el orden del día por parte del PP, y que solo acudirá si se habla de la capacidad eléctrica. En declaraciones a los medios de comunicación en la entrada del Parlamento Vasco, recogidas por Europa Press, De Andrés dijo que “han sido los presidentes del PP los que han pedido que se incluyeran las redes eléctricas como asunto de debate”. Pero esto no coincide con la explicación que dio el ministro Ángel Víctor Torres al final del comite preparatorio, donde atribuyó con claridad ese punto del orden del día a una petición del Gobierno vasco, y después relató cómo el PP había utilizado su mayoría en el comité para tumbar todo el guion. Los gobiernos vasco y español, de hecho, siguen negociando para salvar ese asunto. El punto del PP era otro, la seguridad tras el apagón. Pero De Andrés defiende otra versión. “No entiendo cómo el lehendakari ahora pueda decir que no va porque no se habla de las redes eléctricas de distribución de energía, cuando precisamente es una de las materias que ha incluido el PP”, dijo, dando por hecho que el lehendakari está anticipando que no va a acudir, algo que tampoco ha ocurrido y más bien sucede lo contrario, ya que hay buenas sensaciones.

Por otro lado, De Andrés dijo que “los asuntos de la conferencia se hacen por consenso de al menos diez comunidades autónomas”, así que “no hay imposiciones”. Lo que no dice De Andrés es que las comunidades que han tumbado el orden del día han sido las del PP, que tiene 13, incluidas Ceuta y Melilla; y tanto el PSOE como el PNV creen que actuaban por consigna política. Pero de Andrés zanja: “Una vez más, el lehendakari hace el trabajo sucio a Sánchez para dinamitar una conferencia que Sánchez solo planteaba para salvar la multa. Ha entrado en ese juego de Sánchez para desvirtuar el valor de esta conferencia y no tratar los temas que deben dilucidarse allí por consenso de más de diez comunidades”.