El PNV ha alzado la voz ante los intentos poco disimulados de expulsar a los partidos vascos y catalanes de la contienda electoral y de la fotografía de la campaña para las generales del 23 de julio. Aunque se espera que tenga lugar un debate en el que participen también los jeltzales, EH Bildu y ERC, las principales televisiones y medios de comunicación del Estado preparan ya los debates a dos entre el socialista Pedro Sánchez y el popular Alberto Núñez Feijóo o enfrentamientos con Sumar y Vox que están centrando toda la atención, que van a multiplicar la presencia de estos partidos y que van a marginar al resto. El portavoz del PNV en el Congreso y candidato por Bizkaia, Aitor Esteban, ha rechazado este lunes estos debates “restringidos” por dos razones, ya que ni permiten escuchar a los portavoces de los grupos que tienen otro modelo de Estado, ni reflejan con fidelidad lo que se decide en estas elecciones, porque no se elige un presidente, sino la composición de un Congreso con distintas fuerzas que pueden ser decisivas en la negociación de leyes y de las distintas medidas. En resumen, Esteban cree que se “engaña” a la gente.

En una rueda de prensa en Sabin Etxea para presentar la declaración del EBB sobre la presidencia europea, Esteban respondió a algunas preguntas de actualidad, como la relativa a estos debates y la forma en que quedan marginados los nacionalistas vascos y catalanes. “Aquí hay mucho interés en que esto parezca una elección presidencial, que aquí hay dos candidatos y punto. Pero esto no es así. Esto son elecciones parlamentarias y hay gente, como nosotros, que tenemos una idea diferente del modelo de Estado, y deberíamos estar presentes en todos los debates porque, si no, en el fondo se está engañando a la opinión pública, se está diciendo que estas son las alternativas, y punto. Y no, no, hay más alternativas y visiones, y eso es lo que se va a votar, un Parlamento y no la presidencia. Por lo tanto, no veo con buenos ojos este tipo de debate restringido”, avisó.

"Unas elecciones abiertas, en el Estado y en Euskadi"

El PNV está echando toda la carne en el asador para romper la polarización PSOE-PP característica de las elecciones generales, empezando por el cartel electoral que postula a Esteban como la alternativa en Euskadi. El PNV necesita todos los esfuerzos, con el problema añadido de que ahora que el Sociómetro augura un empate a cinco escaños entre PNV, EH Bildu y PSE en Euskadi y augura una elevada abstención, lo que vuelve a plantear el mismo problema que ya jugó una mala pasada a los jeltzales en las municipales y forales del 28 de mayo. El PNV solo ha perdido las generales ante partidos estatales que se beneficiaron de las llamadas al supuesto voto útil, PSOE y Podemos, pero siempre ha quedado por delante de la izquierda abertzale y no le han arrebatado el título de mejor defensor de los intereses vascos, una pelea que ahora también está reñida en un escenario de abstención que beneficia a Bildu.

Esteban ha dicho este lunes que la campaña, el voto por correo y la participación pueden modificar la fotografía y que estas son unas elecciones “abiertas y no está asegurado el resultado para nadie, ni a nivel del Estado ni a nivel de Euskadi”.