bilbao - Raquel González Díez-Andino pugnará con la oficialista Nerea Llanos para la presidencia del PP de Bizkaia en la votación que se celebrará el próximo 9 de junio. La concejala popular en Getxo anunció ayer su salto a la carrera por la sucesión del actual presidente, Antón Damborenea, que esta semana ha anunciado que no se presentará a la reelección y ha señalado a Llanos como la candidata idónea para sucederle. Sin embargo, la actual coordinadora del partido en la CAV deberá medir sus fuerzas con González que en su tarjeta de presentación reivindica para sí el cartel de la “renovación” ante un modelo de dirección “agotado” y carente de “autocrítica”.

En la rueda de prensa ofrecida en Bilbao, González se presentó ayer como paladín del sector alternativo a la dirección hasta ahora regida por Damborenea, al que afeó que esperara hasta el último momento para presentar su renuncia a la reelección. “Al final, es su mano derecha la que toma las riendas, y acabamos en la misma línea continuista”, criticó en referencia a Llanos.

Aclaró que no hay desavenencias de corte ideológico entre ambas candidaturas, ya que “las bases del partido son las mismas”, y explicó que las diferencias se centran en las formas de actuar. “El modelo que tenemos hasta ahora está agotado y lo desarrollamos una y otra vez sin obtener resultado. Hay que darle una vuelta”, precisó la candidata. A su juicio, uno de los indicadores de que el modelo de dirección del partido está periclitado es la pérdida progresiva de votos y de representación en las instituciones del territorio que cifra en “casi un 50%” en una década.

Tras echar de menos un ejercicio de “autocrítica serio” por parte de la dirección actual, González también se refirió al desapego creciente entre los propios afiliados del partido. Según señaló, se han “separado del partido, fruto de una desgana” derivada de la sensación generalizada de ausencia de medidas desde la cúpula. “El partido se ha instalado en una senda que desarrolla los mismos modelos, ya gastados. Es una senda muy hermética a la hora de actuar con la sociedad civil y hay que renovar e ilusionar porque hay otra forma de encarar los retos”, apostilló la concejala de Getxo.

Su candidatura está arropada por los principales dirigentes del partido en Getxo, el principal granero electoral de los populares vizcaínos junto al centro de Bilbao, como Marisa Arrue y sus compañeros en la corporación municipal. Según defendió, está avalada por “un gran equipo” que le va a permitir presentar un nuevo proyecto en el Congreso provincial del 9 de junio. Asimismo, aseguró que cuenta con el apoyo de “caras conocidas y personas de peso” dentro del partido, cuya identidad no revelará hasta que finalice el plazo de recogida de avales en la segunda semana de mayo. “Lo que buscamos es reilusionar a la afiliación para que quieran volver a formar parte del partido y devolver al PP de Bizkaia la relevancia que merece, que recuperemos los espacios perdidos y la ciudadanía nos vuelva a ver como una alternativa real”, subrayó.

La oposición a Damborenea alimentó la posibilidad de la presentación de una candidatura alternativa. Incluso se barajó el nombre de Amaya Fernández, actual secretaria general del PP de la CAV, para batallar con el todavía presidente de los populares de Bizkaia si este hubiese presentado su candidatura, con lo que la número dos de Alfonso Alonso podría haber asumido con los dos cargos. La renuncia de Damborenea parece haber desactivado esa posibilidad, aunque nada más conocerse que Nerea Llanos se postulaba Raquel González anunció la presentación de su candidatura.

González se mostró ayer convencida de que tanto el presidente del partido en Euskadi, Alfonso Alonso, como Amaya Fernández se mantendrán imparciales en el proceso. A su juicio, deben mantenerse al margen, imparciales, y dejar que sean los afiliados quienes decidan”. Asimismo, afirmó que las dos candidaturas buscan lo mejor para el partido por lo que no descarta la posibilidad de consensuar una única lista y “poder seguir trabajando juntos”.