Bilbao. Los dos últimos fichajes estrella de Endesa y Gas Natural Fenosa, José María Aznar y Felipe González, van a cobrar un sueldo más que considerable en estas dos compañías que vendrá a complementar una asignación de casi 80.000 euros brutos anuales procedentes de los Presupuestos Generales del Estado. Una retribución esta última que tiene carácter vitalicio en razón del cargo desempeñado por ambos como presidentes del Gobierno español y que es compatible con los sueldos que percibirán en su nueva tarea en el sector privado.

Según recogen las cuentas públicas para este año, la asignación total para los ex presidentes Adolfo Suárez, Felipe González y José María Aznar es de 238.010 euros, lo que supuso una reducción del 12% respecto a los Presupuestos de 2010 y, por tanto, de 10.000 euros en esta pensión vitalicia que recibe cada ex mandatario. La legislación actual no pone condiciones a que los ex jefes del Ejecutivo puedan ocupar cargos en la empresa privada como asesor externo o como consejero, que ha sido el caso de Aznar y González respectivamente, y a la vez seguir recibiendo el salario público que le otorga anualmente el Estado.

Ese reparto implica que los expresidentes cobran una asignación alrededor de 2.000 euros superior al salario anual que las cuentas públicas de este año prevén para el jefe del Ejecutivo, José Luis Rodríguez Zapatero: 78.185,04 euros en concepto de retribución.

Tras conocerse que los sueldos que recibirán González y Aznar por formar parte de las citadas compañías eléctricas (200.000 euros el segundo y en torno a 126.500 euros el primero de ellos), las minorías han puesto en entredicho esta compatibilidad. Tal es el caso de ERC, IU, BNG y UPyD, que cuestionan la ética de ambos exmandatarios por haber aceptado formar parte de empresas habiendo participado en el pasado en sus respectivos procesos de privatización y por recibir los sueldos antes mencionados en plena crisis económica. Por todo ello, piden endurecer la actual Ley de Incompatibilidades de los ex altos cargos del Gobierno cuya ética pública, en el caso de los expresidentes del Ejecutivo, debería ser "más estricta", en palabras del portavoz del BNG en el Congreso, Francisco Jorquera, o incluso suprimir las retribuciones públicas, como pidió Rosa Díez.

Quien también arremetió duramente contra la decisión de Endesa y Gas Natural Fenosa ha sido el PNV, cuyo portavoz económico en el Congreso, Pedro Azpiazu, emplazó a los citados ex presidentes a "reflexionar" sobre su "vergonzoso" "fichaje", por el que, según destacó, cobrarán un sueldo que duplica al que recibían cuando fueron presidentes.