IRUÑEA. Además, mientras dure la tramitación de la causa y en tanto no recaiga resolución firme que ponga fin al procedimiento, el juez mantiene la prohibición de los dos acusados de acercarse a menos de 200 metros de la víctima, cualquiera que sea el lugar de su domicilio, lugar de trabajo o cualquier otro.

Asimismo, requiere a cada uno de los dos procesados que presten una fianza de 15.093 euros para asegurar las responsabilidades pecuniarias que pudieran imponerse en este proceso.

Según el escrito de acusación del fiscal, los hechos tienen su origen en septiembre de 2014, cuando el acusado Mikel G.M. alquiló una vivienda en el Valle de Odieta al que posteriormente sería la víctima. La persona que les puso en contacto era un amigo común.

Más adelante, el 30 de noviembre de 2014, Mikel G.M. junto con el también acusado Jesús María M.B. y una tercera persona no identificada acudieron al domicilio de otro hombre al que acusaron de haber robado una plantación de marihuana de la vivienda alquilada junto con el propietario del piso y el amigo común que había propiciado el alquiler.

Ésta última persona acudió al domicilio al que también habían ido los acusados, quienes, según el fiscal, "le ataron las manos con una cuerda a la espalda y en contra de su voluntad lo subieron a un vehículo y trasladaron a un descampado cercano al río en Elizondo, donde le propinaron numerosos golpes y le retuvieron hasta las 3 horas del 1 de diciembre".

Sufrió inflamación del lado izquierdo de la cara y una herida incisa en la cabeza a consecuencia de los golpes, sin que conste que requiriera tratamiento médico para su curación.

Posteriormente, con la excusa de comprobar los daños causados en un cristal de la vivienda, el acusado Mikel G.M. pidió al propietario del piso que acudiera al mismo el día 1 de diciembre de 2014.

Cuando llegó el propietario, los dos acusados y una tercera persona no identificada "le exigieron la entrega de 10.000 euros mientras le decían: 'Te voy a matar, hijo de puta, me cago en tus muertos, o me traes mañana a las 12 horas los 10.000 euros o tú, tu familia y amistades corréis peligro... venga hijo de puta", según recoge el fiscal.

El escrito de acusación añade que para conseguir amedrentar a la víctima y que entregara el dinero "los acusados le clavaron un destornillador por debajo de la uña del dedo índice derecho y le realizaron un corte con el filo de una navaja en el dorso de la mano izquierda". Al día siguiente la víctima entregó los 10.000 euros.

Como consecuencia de la agresión, la víctima sufrió lesiones consistentes en hematoma subungueal circular de 0,5 cm en dedo de la mano derecha y herida en dorso de la mano izquierda, que requirió tratamiento médico.

El fiscal pide una pena de tres años de prisión para los acusados por cada uno de los dos delitos de detención ilegal, otros tres años de prisión por el delito de amenazas condicionales y otros tres años por el delito de lesiones. Además, por una falta de lesiones pide imponer una multa de 600 euros.