Después de seis larguísimas temporadas en División de Honor B. Después de haber llorado otros tantos intentos y, sobre todo, después de haberse quedado a las puertas la pasada campaña; el Getxo Rugby tuvo ayer su merecido ascenso. El conjunto rojinegro jugará el próximo curso en la Liga Iberdrola tras vencer en Fadura al Cisneros (27-12) en la final del play-off a la máxima categoría del oval estatal. Lo hizo, además, con el buen sabor que dejan las remontadas porque las aurinegras tuvieron que darle la vuelta a un marcador que se marchó al descanso 5-12 en su contra. Sin embargo, tras una liga regular perfecta, en la que las getxotarras no habían perdido ni un solo partido, el curso no podía torcerse por una ajustada primera mitad. Otra vez no.

Era la segunda oportunidad en dos años y esta vez la han aprovechado. Sabíamos que iba a ser un partido duro y físico porque todas las finales son así y que cualquier detalle podía romperlo. Pero ha estado marcado por la mentalidad que tienen las chicas y con el físico con el que rompen los segundos tiempos. Hemos tenido la paciencia para llevarnos el encuentro”, dijo Aitor Etxebarria, entrenador del Getxo.

Por eso tras el descanso, el equipo de Fadura se puso el mono de trabajo y dejó a su rival seco. Así, un parcial de 22-0 volteó la contienda gracias, sobre todo, a los recambios aurinegros. “Es la idea que teníamos y la gente que ha ido entrando cada vez han puesto más ritmo y han roto el partido. Porque al final no son 15, sino 23 las que están y todas las que se han quedado fuera las que han conseguido esto”, dijo Etxebarria.

El oval era de las locales, que jugaban siempre en 22 ajeno, pero el Cisneros no iba a vender tan barata su piel. Se encerró. Echó el candado y tiró la llave. Pero entonces Azpitarte optó por buscar los palos y rompió la dinámica (8-12). A partir de ahí las de Fadura se soltaron y protagonizaron sus mejores minutos. De hecho, su juego dinámico salió a relucir en el siguiente ensayo, donde el oval paso de manos a manos para ir superando metros y que Aresti lo posara. Azpitarte tampoco falló en la transformación y el Getxo ya dominó el luminoso (15-12).

Bárbara Plá se retira como jugadora profesional

Las aurinegras no se conformaron. Estaba en juego el ascenso. Así que fueron a por más. Abrieron huecos en la hasta entonces férrea defensa del Cisneros y Bárbara Plá logró un ensayo en el que fue su último partido. La aurinegra se despidió del rugby profesional, al menos como jugadora, tras ser internacional con España, jugar Europeos, Mundiales e incluso en los Juegos Olímpicos de Río en 2016. Y aunque todavía desconoce en qué dirección irá su futuro, se marchó satisfecha sabiendo que lo hizo dejando al Getxo en División de Honor.

Sin embargo, el de Plá no fue el último ensayo del partido puesto que Ojembarrena puso el 27-12 definitivo y llevó la locura a las gradas de Fadura, que disfrutará de la próxima temporada, la del 50 aniversario del club, en la Liga Iberdrola. Porque tras una temporada perfecta, invicta, el Getxo Rugby ya se lo merecía.