CINCO meses han pasado desde que el oval dejó de volar de mano en mano por Fadura o desde el último drop en Urbieta. Cinco meses se han esfumado ya desde la última vez que se plantó el balón detrás de la línea de El Fango o desde que en Atxurizubi se mandara a palos un golpe de castigo. Y eso es mucho tiempo. Por eso, Bizkaia afronta con ganas el inicio de competición de sus clubes, que tendrá lugar este próximo fin de semana, cuando se escuche el pitido inicial de la División de Honor B. Será entonces cuando Gernika Rugby Taldea, Getxo Rugby, Universitario Bilbao Rugby y Uribealdea RKE comiencen una larga e intensa campaña, con cuatro clubes vizcainos pugnando por mejorar y progresar en la categoría de plata del oval estatal. Los cuatro quedaron encuadrados dentro del grupo A, conocido comúnmente como el grupo Norte, junto a tres equipos guipuzcoanos, dos asturianos, un alavés y un navarro. En total, 11 conjuntos que intentarán terminar la primera fase –que se disputará a vuelta única: 10 partidos en 11 jornadas– entre los tres primeros clasificados, puesto que esos tres pasarán al grupo Élite, el que finalmente pugnará por el codiciado ascenso a División de Honor.

Precisamente uno de los favoritos para conseguir la promoción es el Gernika Rugby Taldea. El club basurde, que está de celebración por su 50 aniversario, es el recién descendido. Es decir, la temporada pasada se codeaba con la élite y por eso su objetivo es recuperar su sitio entre los mejores. Para ello, el equipo ha hecho una gran apuesta por Gorka Argull, que vendrá a sustituir en el banquillo de Urbieta al mítico Eduardo Maidagan. No es un desconocido el nuevo míster, puesto que el bilbaino lleva varias temporadas en el cuerpo técnico basurde. Sin embargo, sí será la primera vez que Argull asuma las tareas de entrenador principal. Y, entre ellas, estará la de acoplar una plantilla que ha sufrido muchísimas bajas, mientras hace bueno con resultados el cartel de favorito al ascenso que llevarán colgado al cuello durante todo el curso. La primera oportunidad para demostrar sus intenciones será este mismo fin de semana con la disputa de la primera jornada en el feudo del Bera Bera.

A la tercera, la vencida

Otro de los equipos que tampoco renuncia a nada es el Getxo Rugby. En el grupo Élite las dos últimas temporadas y tras rozar con los dedos el ascenso a Honor en el play-off de 2022, el equipo de Fadura espera que a la tercera vaya la vencida. Con este propósito, la principal novedad de los aurinegros está también en el banquillo, donde Kemen Goitiandia relevará a la dupla formada por David Martín y Brad Linklater. El nuevo técnico pide no obsesionarse con el ascenso aunque reconoce que no clasificarse para el grupo Élite sí que sería un fracaso puesto que es uno de los primeros objetivos autoimpuestos. Cabe destacar que la temporada liguera comenzará para el Getxo tres semanas más tarde de lo esperado ya que el partido que le enfrentaba esta jornada al Gaztedi ha sido aplazado por petición del conjunto gasteiztarra, mientras que la segunda jornada a los de Fadura les toca descansar por calendario. Así, tendrán que esperara hasta el fin de semana del 14 de octubre para debutar en el encuentro pendiente ante el Gaztedi, con el día y la hora aún por concretar.

Derbi vizcaino

El azar del sorteo también quiso que la primera jornada de la División de Honor B deparara un derbi vizcaino. Uribealdea y Universitario Bilbao Rugby se verán las caras en Atxurizubi, en lo que se prevé un encuentro muy igualado a tenor de lo visto la temporada pasada, cuando los segundos se llevaron los dos encuentros, pero por escaso margen (20-23 y 10-6). A diferencia de Getxo y Gernika, Uribealdea y Universitario afrontan la campaña con objetivos más modestos, pero sin descartar nada. Conscientes de que su liga será otra, el primer propósito de ambos será el de mantener la categoría. Para ello, hay que tener en cuenta que descenderá directamente el último del grupo –de una segunda fase que disputarán los 8 últimos clasificados de la primera, en formato de todos contra todos a una vuelta y con arrastre de puntos–, mientras que el penúltimo jugará una promoción a partido único con el segundo clasificado de la Fase de Ascenso de regional. Sin embargo, una vez conseguida la permanencia, Universitario y Uribealdea quieren mirar sin reparos hacia arriba. Es decir, estabilizarse en la categoría de plata y poder presumir de hacerlo, encima, con la gente de casa.