MAYO repite en nuestra tierra inestabilidad con indiferencia. Calor, lluvia, frío. Frío, calor y lluvia. Estamos acostumbrados a las variaciones del termómetro y ni siquiera ponemos mala cara cuando tenemos que volver a abrir el paraguas y ya teníamos las sandalias de verano preparadas. Claro que, normalmente -una normalidad que no entienden fuera de nuestro territorio- las mujeres, como quien incluye pañuelos de papel, llevamos un paraguas plegable en el bolso.
Quizás por esa naturalidad ante la fría mañana, una gaviota se ha quedado mirándome en el muelle. No se ha movido mientras me dirigía a ella. Me ha sorprendido su quietud, su falta de miedo ante mi cercanía. Parecía que había adquirido un extraño dominio, como una repentina fuerza. Cuando me faltaba un metro para llegar a ella, ha levantado el vuelo asustándome a mí. Quizás el símbolo de poder que ahora presenta al mundo esta ave marina le ha dado una dignidad presumida que antes pasaba más oculta para mí.
Me encantan las gaviotas, y no me gusta que representen signos políticos, quizás porque, instintivamente, la eterna libertad que parecían plasmar se ha quedado coartada por un mensaje que ya no recuerda a Juan Salvador Gaviota.
¿Qué me dicen de los leones?
Creo que nos equivocamos con los símbolos. Bambi, Dumbo, El Rey León... la ternura de los hombres la representan los animales. Algo estamos haciendo mal cuando no somos capaces de dibujar nuestros ideales más que con símbolos irracionales. De todos modos, en este muestrario animal, siempre hay símbolos que nos identifican. ¿Qué me dicen de los leones?
Euskadi is diferent en muchas cosas. Por ejemplo: Crisis, ¿qué crisis? En Bucarest los vascos se han reído del miedo con tranquilidad cotidiana porque tenían sus leones particulares. ¿Ángela Merkel, esa señora que amarga a Europa? ¿Grecia...? ¡Uf! Está muy lejos. Y, mientras media España enciende el televisor para saber qué pasará en el partido de Madrid, en Euskadi, como lo más normal del mundo, unos hacen las maletas para alentar a su equipo y otros preparan la gabarra para celebrar el éxito por la ría. Ningún aficionado se pregunta por el resultado. A fin de cuentas, en Bucarest se lloró todos juntos y se disfrutó de tener algo único -aunque aquel día con mala suerte-, un equipo con la misma sangre. ¿Quién puede decir lo mismo? Pues nadie.
Dicen los mal pensantes que esto del futbol es una estrategia, como un juego del corro sin salida, para despistar la atención ante otros problemas que nos rodean. Pero la atención general está muy disipada. Hace unos días, por ejemplo, la Junta de Andalucía se convirtió en un paritorio. Todos los concejales, inesperados papás y mamás, tuvieron que celebrar su pleno extraordinario en el hospital, a los pies de una niña. El bebé de Alicia, una concejal del consistorio, hizo que su madre se transformara en la protagonista del cuento del País de las Maravillas. Su voto era tan importante que no podía llegar tarde y sus compañeros acudieron al centro sanitario para terminar la historia con un final feliz. La bata rosa de seda puso el color en un encuentro habitualmente gris.
Lo que no tiene nada que ver con los cuentos, y parece incoloro, es la nueva página de un canal televisivo especializado en perros: DogTV. No se preocupe, amable lector, si tiene problemas con su mascota a la hora de irse solo a un partido de futbol. Quizás el año que viene EITB se adhiere a esta posibilidad. La televisión para perros ya es una realidad. Los dóciles animalitos domésticos, para que no se aburran en las horas de soledad, tendrán su propio canal adaptado a sus gustos. Y ¿qué les gusta a los canes? Pienso que pasear por el campo, enamorarse de dulces damitas perras, jugar con una pelota, chapotear en el agua...
En esta crisis social, los escritores seguro que no habían pensado en su vida en la posibilidad de escribir guiones exclusivos para perros. Historias con un principio, nudo y un desenlace final. Quizás con el tiempo, los dueños de los perros puedan elegir cine más especializado para sus queridos animales: comedia, humor, hazañas bélicas y hasta fútbol canino. Como la imaginación de los pensadores no tiene límites, se puede esperar cualquier cosa; pero, aquí, no puedo pensar, ni con fiebre de 40º, semejante imbecilidad. Euskadi is different dentro de un maravilloso orden. Y somos tan sumamente originales que hasta es posible que tengamos nieve en mayo. Las bufandas van a servir de abrigo. Las fotos rojiblancas que nos esperan envolverán sonrisas, lloros y gritos de felicidad o tristeza. Nunca hemos estado tan cerca de volver a navegar por la ría.
Por repetir aquel magnífico espectáculo, se justifica hasta una peregrinación de urgencia a Lourdes previa al encuentro. Si hace falta hasta de rodillas. No sé si a esta propuesta piadosa se apuntarían algunos de los forofos que se van a Madrid, aunque todo es proponerlo. Como Euskadi is different, cualquier cosa por apoyar a los leones puede pasar en estas últimas horas.