En fechas recientes leía unos comentarios del responsable en materia de Aguas del Gobierno de Patxi López. Ciertamente eran comentarios que pretenden echar balones fuera y realizados a la defensiva respecto a exigencias concretas que se han dirigido a este Gobierno. Leía el artículo en mi silla del Parlamento, tras el discurso del lehendakari en el que determinaba las medidas contra el déficit que iba a aplicar su Gobierno tras el conocido zapaterazo en Madrid. Por cierto, el discurso del lehendakari en su integridad se publicitó en un medio de prensa afín al Gobierno antes que se trasladara a los parlamentarios desde la tribuna.

Desconozco en qué afectarán las medidas adoptadas a cuestiones como las inversiones en el saneamiento de Urdaibai y otras cuantas en esta zona. López tendrá que aclararlo. Pero lo que sabemos es que muchas de las previstas por el Gobierno Ibarretxe no se han ejecutado o no se van a realizar. Estamos hablando además de las inversiones en ferrocarril (24 millones de euros), en reactivación económica de la zona (polígono comarcal Muxika), en mejoras medioambientales en la única Reserva de la Biosfera de Euskadi, en el puerto de Bermeo, en el Centro de Formación Profesional de Gernika... Y cómo no, en el saneamiento de Urdaibai.

Patxi López prometió una Plan para Urdaibai y por boca del Sr. Pastor (vocero socialista) se puso nombre a este plan prometiendo un Parador Nacional... Veremos en qué queda este plan que se publicitará, al parecer, en breve.

Pero centrémonos en el saneamiento de Urdaibai. Debemos recordar a este Gobierno una realidad que los residentes en Urdaibai conocemos muy bien: es la única zona de Euskadi en la que el Ejecutivo dispone de competencias expresas atribuidas por la Ley de Urdaibai y el PRUG que la desarrolla. Y si la Reserva es una de las zonas ambientalmente más significativas de Euskadi, a todos nos corresponde garantizar y preservar ese equilibrio. También y en especial al Gobierno vasco.

Lo repetiré alto y claro: este Ejecutivo paralizó las obras de saneamiento de Urdaibai. El Gobierno López forma parte del Consorcio de Busturialdea con un representante directo en su ejecutiva. Deberían saber este Gobierno y sus responsables que en las contrataciones públicas el gasto comprometido y lo realmente pagado son dos conceptos diferentes. Y a fecha de diciembre de 2009, cuando se aprobaron las cuentas para 2010 de este Gobierno, el Consorcio de Aguas de Busturialdea tenía comprometido el gasto de 31 millones de euros (y no 7 como mantienen los responsables gubernamentales).

En diciembre de 2009 estaban adjudicadas las obras de los tramos de Mundaka-depuradora; Sukarrieta-depuradora y el tramo de Busturia a Sukarrieta por un importe de 31 millones de euros. La conexión de Bermeo con la depuradora ya se está ejecutando a cargo de la Diputación Foral de Bizkaia.

La adjudicación de una obra, para quienes tenemos algún conocimiento de contabilidad pública, supone que ese dinero se encuentra ya dispuesto, comprometido, en espera que quien ha resultado adjudicatario realice la obra y, previa verificación técnica de su buena ejecución, se realice el pago efectivo.

El Gobierno confunde por tanto el pago efectivo (lo que lleva cobrado el contratista, 7 millones de euros) con lo que realmente tiene comprometido y licitado el Consorcio de Aguas (31 millones de euros). Y es que, señores del Gobierno, nadie paga una obra hasta que se verifique que se ha realizado correctamente. Ni en su casa ni en la Administración. Espero que en el Gobierno vasco tampoco lo hagan. Presiento que existe un ánimo de confundir, de emplear la mecánica administrativa a su gusto. En definitiva, pretenden justificar una posición, la de este Gobierno, totalmente injustificable.

Como resulta injustificable que el Gobierno López, ante una enmienda específica presentada por el PNV a los presupuestos para 2010, en la que se solicitaba incorporar y asegurar financiación para los próximos años para el saneamiento de Urdaibai, ni siquiera quisiera hablar de este concepto. No incluyeron ni un solo euro para garantizar la continuidad de las obras de saneamiento en Urdaibai. "¿Y para qué incluir dinero en 2010?", afirmaba la consejera en tribuna parlamentaria (manifestación que repite ahora su responsable de Aguas en prensa?). Pues precisamente para poder seguir adjudicando las obras pendientes y posibilitar así que los tramos pendientes de Gernika-Busturia y Muxika-Gernika pudieran licitarse y comprometer y asegurar así su finalización. Estas obras, de haber habido financiación en 2010, se podían haber licitado durante este año y haber comenzado, por tanto, las obras para su finalización.

Me alegra, sin embargo, que este Gobierno diga ahora públicamente que apuesta por el saneamiento de Urdaibai. Quizás ha llegado a esta conclusión por la presión y el sonrojo producido por tanto comentario sobre la dejadez que este año 2010 ha hecho este Gobierno en la única Reserva de la Biosfera de Euskadi. Incluso su socio preferente, el PP, tuvo que reconocer el error y exigió al Gobierno su apuesta por el saneamiento de Urdaibai. Espero que en los presupuestos para el año 2011 exista un reflejo evidente de impulso de esta obra y no quede, al igual que nos tiene acostumbrados, en meras soflamas y titulares de prensa. Nosotros, desde nuestra posición y como residentes en la comarca, así se lo exigiremos.