LA visita oficial del Gobierno vasco, encabezada por el lehendakari Urkullu ayer al Vaticano supuso un hito en la respuesta de las instituciones de la CAV a la situación humanitaria urgente que exige el imparable fenómeno de la inmigración. La audiencia pública con el Papa Francisco y el traslado de la iniciativa Share para una responsabilidad compartida en la distribución y acogida ponderada en base a indicadores como los ingresos fiscales, la población y el nivel de desempleo de las regiones, obtuvo una buena acogida, por realista, por parte de las instituciones vaticanas con el traslado directo de la propuesta en su segundo encuentro al secretario de Estado Vaticano, el Cardenal Pietro Parolin. El Gobierno vasco, tras presentar su iniciativa al Comité de las regiones en Bruselas, y que ya ha sido suscrita por diversos Gobiernos regionales europeos, eleva el empuje de su trabajo, con clave en la ecuanimidad de las fórmulas de acogida, al ámbito vaticano y en concreto al Papa, cuya sensibilidad al drama del fenómeno migratorio ha sido manifestada en numerosas ocasiones. La visita de la delegación vasca, suma un escalón más en el plan de internacionalización de la iniciativa para canalizar mediante una estrategia coordinada el repunte del flujo migratorio, en este caso, a un estado soberano como el Vaticano y en medio de otro verano de fuerte presión migratoria en las puertas de la Unión Europea, ayer mismo con el rescate de 100 personas en el Mediterráneo por parte de una ONG alemana o el caso del desembarco de los rescatados por el buque Open Arms. En este sentido, se han hecho una vez más visibles las resistencias de aquellos Estados opuestos a admitir que se trata de un compromiso que debe ser abordado de forma compartida y no unilateral por lo que la fórmula vasca potencia también el impulso para la superación de los mensajes populistas que recorren Europa en clave de rechazo a la inmigración. Conocida ya la propuesta y expuesta en otros foros, la presentación del plan vasco en el Vaticano, que ayer se mostró dispuesto a trabajar conjuntamente con Euskadi en la acogida de refugiados en Europa, avanza en la internacionalización de la propuesta vasca y excede el ámbito de las regiones para su conocimiento y colaboración en el marco del reto más importante de todos los tiempos a nivel europeo.