lAS eliminatorias son así. No vale fallar, un partido malo y estás en la calle. Los resultados en la fase de grupos obligan al Athletic a buscar la clasificación fuera de San Mamés, concretamente en el GSP Stadium de Nicosia. El marcador de la ida favorable a los leones es más una trampa que una ventaja. No vale especular con el mismo. Los de Valverde deben salir a ganar, de lo contrario dudo mucho poder estar en la siguiente ronda. El potencial de los chipriotas quedó demostrado en La Catedral. Un equipo voluntarioso pero muy alejado del nivel del Athletic. Es cierto que eso se demuestra en el verde y de nada vale medir unos y otros con un papel delante. Los leones fuera de casa esta campaña son sencillamente un desastre. No ganan partidos, no marcan goles y eso sí, los reciben. Son un visitante cómodo y lo peor es que lo son en todas las competiciones. No acaban de convencerse de sus posibilidades y da la sensación de no saber exactamente qué es lo que se juegan en cada partido. El domingo daba la sensación de que unos se jugaban la vida y otros, nada de nada.
Valverde tendrá que modificar cosas en ataque ante la ausencia de Aduriz y probablemente también algo en la parcela defensiva. La banda izquierda o lo que pretendió que fuese lo de Mestalla dista mucho de un carril competitivo. Jugadores que no juegan habitualmente y tampoco lo han hecho juntos. Los males no solo llegaron por ahí, pero si quiere recomponer el equipo táctica y moralmente tiene mucho trabajo por delante. Esta temporada podemos contar con los dedos de una mano los partidos en los que hemos identificado al Athletic con sus características y lo que en su día nos han mostrado.
No me gusta cuestionar a un técnico como Valverde, no lo merece por sus méritos. Eso sí, de momento este curso no da con la tecla con regularidad. Hay tiempo de sobra para mejorar las cosas y en Chipre el equipo debe demostrar que es más y mejor. Tiene que marcar un punto de inflexión y sobre todo hacer más cosas bien durante más tiempo. El jueves está prohibido fallar, el Athletic tiene que plantarse con todas y cada una de sus señas de identidad.