VICTORIA de mérito y necesaria. Sonará raro, pero el Eibar era un rival temible. Su juego y resultados invitaban a ser extremadamente cautos y el equipo rojiblanco se medía a los armeros con las importantes bajas de Aduriz y Raúl García. Los puntos se quedaron en San Mamés y todos felices. Valverde puede decir que este equipo es más que los dos de arriba.
Fue una tarde de domingo de esas que no pasará al recuerdo por lo que pasó en el rectángulo de juego. A lo sumo nos quedaremos con el golazo de Williams tras una carrera de las de velocista puro. Iñaki tiene un don y ese es el de la carrera. Si lo aprovecha y exprime es un jugador distinto, brutal. Un jugador capaz de cambiar el signo del partido y decantar la balanza del lado de los suyos. Ya sabe cómo se hace, ahora hace falta que lo haga habitualmente.
El Athletic más joven supo ganar a un conjunto que tiene grandes jugadores en sus filas. El domingo en el once había ocho jugadores menores de 25 años y el más veterano era Beñat. Si a esto le añadimos que todos los que jugaron salvo uno son de Lezama, está claro que el Athletic tiene un futuro maravilloso por delante. Además hay que sumar el debut de Asier Villalibre, el delantero de Gernika ya es león.
Bien clasificados en liga y con la eliminatoria de copa encarrilada ahora toca ir a por el liderato del grupo en la Europa League. Prestigio y dinero deben suponer suficiente aliciente para ir a Viena a por todas. El técnico podrá contar para ese partido con sus dos delanteros habituales, vamos a ver si opta por hacer algún cambio y dar minutos a otros futbolistas.