No me imagino yo a Marcelino Camacho, allá por los ochenta, preocupado por Eurovisión. Anda que no hay motivos para protestar cada día: la luz, la gasolina, los chanchullos políticos... Cuando el burro se aburre, ya sabemos lo que hace. Una supuesta izquierda majadera que falta el respeto a la izquierda de verdad, seria e implicada.NOTA DE REDACCIÓN. Las cartas no deben superar los 500 caracteres y deben estar identificadas con nombre y apellidos de su autor, así como la dirección, teléfono y el DNI. DEIA se reserva el derecho a la edición de las mismas.