El ciclismo es un deporte que levanta pasiones y donde conviven emociones, entusiasmos e ilusiones. Quiere decir que su práctica alcanza límites humanos. Recientemente hizo 53 a-ños de la muerte, a la edad de 26 años, del txirrindulari Valentín Uriona -Múxika Mungia-. El 30 de julio de 1967, sufrió un accidente mortal en plena competición en Sabadell. Derrapó, cayó de la bicicleta y su cabeza se golpeó con el borde de la acera. Los triunfos, en especial profesionales, del corredor del Kas, Fagor -de manera preferente- en las Milán-Turín y Dauphiné Liberé fueron muy celebradosen Mungialdea. Otros profesionales, que nos dejaron los últimos 50 años, fueron Nikolás Landa Potxorrio -Gámiz-Fika, Beyena-, Jose L. Elorriaga -Fruíz, Ferrys, Karpy-, Agustín Sagasti -Mungia, Euskadi-. También merecen ser reconocidos numerosos txirrindularis -activos o no-, aficionados, féminas, etc. de nivel inferior.