A la I+D+I, Investigación más Desarrollo más Innovación que tiran del progreso en el mundo, hay que añadir desde ahora en España otra I, la I de Imaginación. Una I gigantesca, como gigantesca es la imaginación de un pueblo, que es capaz de elevar la barbaridad de los toros al rango de diplomatura.

Pronto se podrá estudiar torería en España, como en los países subdesarrollados que solo tienen I+D+I, se estudian Energías Renovables o Nanotecnología. A Simplicius pasmado de admiración ante una aportación de tal calibre a la cultura universal, solo le queda preguntar ¿cuándo nos largamos?