La historia debe servirnos para entender mejor el presente y previo análisis del pasado interpretar el futuro, poniendo en valor ideas democráticas, acuerdos, etc., con el fin de alcanzar la convivencia. Legalidad y realidad democrática circulan de forma paralela, en el ordenamiento constitucional español. La ley estatal establece que la rojigualda se encuentre presente junto a otras enseñas -ikurriña, local, etc.- en actos institucionales. El TSJPV, a requerimiento del delegado español, Carlos Urquijo, forzó en septiembre la puesta de la bandera española en la fachada mungiarra. El 13 de febrero, la alcaldesa, Izaskun Uriagereka y la edil de Cultura, Maribe Bilbao, presentaron su dimisión. Del mismo modo, mostraron su contrariedad catorce de los 17 concejales que componen la Corporación. Para superar esta desavenencia en materia simbólica y establecer la presencia preferente de la ikurriña será necesario, en próximas consultas, profundizar en acuerdos y negociaciones con el Gobierno central para lograr una auténtica convivencia.
