A la exalcaldesa de Mungia

Leo en los periódicos de Euskadi, que abandona usted el cargo porque la obligan los tribunales españoles a colocar la bandera española en el balcon del Ayuntamiento junto a nuestra ikurriña. Este gudari de 1936 está con usted y considero que ese paso lo deberían dar todos los alcaldes de los ayuntamientos gobernados por el PNV. Señor Urquijo, creo que estamos en una democracia y no se puede obligar a nadie a ir en contra de sus representados que no desean que la bandera española ondee de la balconada de su Ayuntamiento, eso hacia el dictador que obligaba a todo el País Vasco a colocar en todos los balcones su bandera, que no la nuestra, bajo multa por no cumplir esa imposición. Usted no se preocupa tanto de los símbolos franquistas que todavía existen en nuestra tierra. Eso duele mucho a los verdaderos demócratas y más a los que luchamos y sufrimos el franquismo pasando por cárceles y campos de concentración, siendo además esclavos del régimen. Este pueblo vasco está esperando que llegue la verdadera paz para todos y que el PP reconozca el mal que Franco le hizo a este pueblo durante los cuarenta años que permaneció en el poder, dejando después la continuidad del régimen atada y bien atada, con un rey que no fue elegido por nadie. El Partido Popular tampoco quiere reconocer a las víctimas de aquel terror franquista que fue peor que el de ETA y que después de tantos años sigue sin reconocer.