OMO todos los matrimonios unidos por el puro interés, la coalición PSOE-Unidas Podemos perdurará más allá de las tensiones aireadas. Son como esas parejas que no disimulan, se sabotean y maniobran en el oscurantismo de los gestos feos al tiempo que hacen de la necesidad virtud. Lo último han sido las condenas por los incidentes tras la entrada en la cárcel de Hasél. Un miembro de la pareja hace oposición y el otro va por libre. Mal avenidos pero sólidos, ninguno ve peligrar la salud de su matrimonio y en el ejercicio del "todo es para siempre" asumen tristemente que los sabotajes seguirán.